El español le ganó en cinco sets al bùlgaro en la segunda semifinal del primer Grand Slam de la temporada y el suizo será su último obstáculo, en busca del trofeo en territorio oceánico.

El español Rafael Nadal, nueve veces campeón de Roland Garros, avanzó hoy a la final del Abierto de Australia, primer torneo de Grand Slam del año, tras superar al búlgaro Grigor Dimitrov por 6-3, 5-7, 7-6 (7-5), 6-7 (4-7) y 6-4 tras cinco horas de juego, e irá en busca del título el domingo frente al suizo Roger Federer, en una nueva versión del gran clásico del tenis moderno.

Nadal, de 30 años, se sobrepuso a esos momentos clave, y también a los 79 golpes ganadores de Dimitrov y a su fe ciega en una victoria que tuvo muy cerca, pero el zurdo español, cuya derecha le abandonó en algunos momentos, logró ganar el encuentro, el segundo más largo de este torneo hasta el momento, superando las cuatro horas y 49 minutos del duelo de segunda ronda entre el uzbeco Denis Istomin y el serbio Novak Djokovic.

Federer había ganado en la otra semifinal a su compatriota Stan Wawrinka, también en cinco sets, por 7-5, 6-3, 1-6, 4-6 y 6-3. La última vez que se necesitaron cinco mangas en ambos duelos de semifinales de un Grand Slam fue en Roland Garros 2009, con Federer derrotando al argentino Juan Martín del Potro, y el sueco Robin Soderling haciendo lo propio con el chileno Fernando González.

Este domingo ‘Rafa’ revivirá uno de los grandes duelos de la historia del tenis, épicos la mayoría de ellos, contra Federer, a quien domina en el «clásico de los clásicos» de este deporte por 23 victorias a 11.

Será la repetición de la final de 2009, con victoria de Nadal entonces por 7-5, 3-6, 7-6, 3-6 y 6-2 después de cuatro horas y 23 minutos, histórica porque el tenis español logró por fin ganar el Grand Slam que faltaba, y en la que el suizo acabó llorando en la entrega de premios.

El español volverá a una final de un Grand Slam por primera vez desde que ganó su noveno título en Roland Garros, en 2014.