El capitán del elenco rojiblanco, Nereo Fernández celebraba en el Clásico los 175 partidos con la camiseta del Tate. Debutó profesionalmente en la Avenida en 2001. Después de la derrota cuando todos esperaban su análisis como máximo referente del plantel se retiró del estadio sin hacer declaraciones a la prensa por una puerta lateral del vestuario.