El plantel rojiblanco regresó este lunes por la tarde a los entrenamientos en el predio Casasol, después de la derrota de la fecha pasada ante Banfield. De cara al próximo duelo ante Talleres en Santa Fe, ya están a disposición del DT Lucas Algozino y Manuel De Iriondo

Después de la derrota del sábado pasado ante Banfield en el Florencio Sola por 3-1, Unión volvió este lunesa los trabajos en el predio Casasol, con el objetivo de levantar cabeza rápidamente. Ahora tendrá por delante un duelo exigente ante Talleres por la 18ª fecha en Santa Fe, con lo cual los propios protagonistas ya se van mentalizando en que hay que sumar de a tres.

El revés ante el Taladro (el segundo en fila en la reanudación) caló muy hondo en el grupo. Es más, muchos de los jugadores tuvieron una fuerte autocrítica sobre este presente, en el que arrastra tres sin ganar y con un rendimiento que tuvo un pico alto con River y que mermó drásticamente en el Clásico. Uno de los síntomas de lo duro que fue, es que el entrenador, Juan Pablo Pumpido, prefirió llamarse a silencio.

Es así como los mismos jugadores salieron a poner la cara y vaticinar que de la única forma que se sale de esta racha adversa es volviendo a ganar. Lo bueno es que tendrán la posibilidad de hacerlo ante su gente, quien siempre se caracteriza por brindar su apoyo en los malos momentos.

De igual modo, el Tate entró solo en una meseta habitual en muchos equipos, porque desde que Pumpido es el DT, se ganó la identidad de luchar en todo momento. Entonces se piensa que esta situación puede ser pasajera; aunque tampoco hay que dejar que se prolongue para que no pase a ser perjudicial. Esto tiene que ver con que aún se está expectante por alcanzar el objetivo: clasificar por primera vez en su historia a una copa internacional.

Será una semana de mucha reflexión y análisis por parte del cuerpo técnico. Más que nada haciendo hincapié en lo defensivo, donde el equipo sufrió mucho en los últimos dos encuentros, algo que no se veía anteriormente. Algo que sorprendió que desde ya motivó la necesidad de buscar soluciones.

Las dos variantes para jugar contra Banfield fueron los ingresos de Rodrigo Erramuspe y Nahuel Zárate, con el fin de ganar altura después de haber sufrido mucho ante Colón en esa faceta. Pero en este caso volvieron a aparecer condicionantes, ya que se los notó irresolutos y con muchas carencias que luego el elenco de Julio Falcioni supo capitalizar. Puede que Pumpido esté pensando nuevamente en recurrir a Agustín Sandona, pero tampoco es que se trate de algo en concreto, sino más bien una variante.

Se vienen cambios
Para el duelo contra Talleres ya están a disposición Manuel De Iriondo y Lucas Algozino, quienes cumplieron la suspensión por haber sido expulsados en el derby santafesino. Daría la sensación de que el rubio volante central volvería a ser titular, ya que es el único de neto corte defensivo en comparación al resto de los que se desempeñan en el mismo puesto. De igual modo, esto tampoco es concreto, porque también el técnico podría apelar a correr a Mauro Pittón al medio dejándole la banda a Algozino.

Pero la serie de conjeturas no quedan solo allí, ya que también aparece algunos movimientos posibles, pero que ya no serían tan formales. Uno sería que Guido Vadalá se mueva en el ataque, retrocediendo Lucas Gamba para ser un volante derecho adelantado. Incluso esto se dio así en el segundo tiempo ante Banfield, aunque los réditos no fueron los esperados.

Por la banda izquierda hay también interrogantes: podría volver a estar entre los once el paraguayo Diego Godoy, aunque su flojo presente no le da el crédito suficiente. Sin embargo, su buena pegada hace pensar a más de uno.

Finalmente, ¿podría tener una chance Federico Anselmo? esto tiene implicancia al quedar afuera del banco de suplentes el último sábado, siendo Nicolás Andereggen el elegido (envalentonado por su tanto en el Clásico de Reserva). Es verdad que Franco Soldano no arrancó las mismas luces con las que finalizó el 2016, pero no sería descabellado pensar en que encuentre un espacio con un doble nueve, algo que casi nunca se vio con Pumpido como entrenador.

Vale destacar que no ingresa en esta serie de detalles Mauro Cejas, quien todavía no está para cumplir 90 minutos de juego, aunque sí está para ser un complemento para los últimos 25 minutos. Una vez que esté a todo, sí será una carta para tener muy en cuenta.

Las combinaciones son muchas, pero lo claro y real es que solo el conductor de Unión sabe lo que es mejor para el equipo. Es así como ya se puso manos a la obra en esta semana, para volver a darle la inyección anímica que el grupo necesita y así ponerle fin a este presente, donde arrastra dos derrotas en fila y un saldo negativo de cinco goles en contra.