En la definición por la permanencia en la Liga Nacional, Ferro le ganó a Salta Basket por 90 a 60. El ex Unión Mauro Cosolito fue una de las figuras con 17 puntos. En Salta dirigía Ricardo De Cecco pero fue reemplazado por Leo Hiriart antes de la serie ante Ferro. Salta descendió en la cancha, ¿será invitado?

Con el ex Unión y Banco Provincial de nuestra capital Mauro Cosolito, la histórica institución tuvo que penar a un quinto punto para salvar la categoría en la Liga Nacional de Básquetbol.
Con un presupuesto importante y con un buen arranque, el tren de caballito tuvo un mal cierre de temporada y casi pierde la categoría que tanto le costó recuperar.
Ante un marco multitudinario en el mítico Héctor Etchar, Ferro no tuvo piedad y venció claramente a Salta Básket, quien debutó en la máxima categoría tras adquirir plaza fuera de lo deportivo, hecho que se repite nuevamente en la presente temporada (equipos que compran plazas con apoyo estatal) la actual conducción de la Asociación de Clubes de Básquetbol.
Salta fue dirigido hasta antes de la permanencia por el conocido por su paso por Unión como Ricardo De Cecco, que por razones personales tuvo que alejarse de la conducción del primer equipo dejando a Leonardo Hiriart como entrenador principal.
Respecto al partido de anoche, poco para resaltar con un resultado tan abultado pero también sin demasiadas equivalencias en el desarrollo del juego. Ferro fue más incisivo, convencido de lo que iba a buscar y Salta olvidó todo lo que produjo en el Delmi. Con diferencias que no variaron de los 10, 15 puntos, la construcción colectiva de Ferro sentó bases en una gran efectividad de Harper y el aporte del ex Unión Cosolito.
Si bien el festejo de la salvación es una cuestión de desahogo, da la sensación que Ferro estaba para más en el certamen y que lo de Salta fue una experiencia. En este último punto, habrá que aclarar dos cuestiones:
1-Como plaza, todo el mundo del básquet se lamenta la pérdida de Salta. A decir verdad, el órden que tuvo y su comportamiento fue notable. Eso está sin discusión. Pero al mismo tiempo, uno no sabe si lamentan verdaderamente el descenso por lo deportivo, o por el viaje de disfrute a la Linda. La apuesta fue de un dirigente que tuvo el respaldo político y económico de Urtubey.
No nos olvidemos que esto arrancó hace tres años y con otra compra de plaza (Villa 20 de Febrero en el Torneo Federal 2015). Llegó la invitación para el TNA y otra compra de plaza por menos dinero y un nuevo plantel. Otro ejemplo de que si el estado no interviene, no se puede mantener semejante presupuesto.
2-El proyecto Salta, ¿cuántos jugadores de la región tuvo?, ¿fue un proyecto deportivo-económico? Nadie duda de la buena intención de Luis Lenti, sin embargo, habrá que madurar la idea nuevamente y ver adonde se apunta: si ver el Delmi lleno, o con buena cantidad de público invlucrando lo público con lo privado, o empezar a gestar un equipo con desarrollo local no para colocar un pibe de abajo, sino formar desde abajo aquellas bases sólidas que desearía cualquier institución con el apoyo del estado.
En una nota de básquet plus, prestigioso y calificado sitio web, el colega Lucas Leiva se dirije a los obtusos que no enteinden supuestamente el tema de quien pone el dinero y sus beneficios. Aquí, la confusión y la contradicción que nace de una mala costumbre: con el estado me animo, sin estado, me quejo. Y en el medio, los que no reciben, ¿como se las arreglan y se los cuida?
La frase de Leiva dice: “Salta Basket no tiene tantos años de vida y por eso su crecimiento sorprende. Cualquiera puede decir que con el dinero es todo posible, tampoco hay que ser obtusos y no percibir que los recursos económicos más el apoyo del gobierno provincial, pero más allá del capital disponible o no, el proyecto de los salteños se ha caracterizado por una palabra clave: el orden”.
Lo que comparto es la palabra órden. Eso no significa que desde la mirada obtusa desconozcamos que sin dinero hay cosas que no se pueden realizar. No es una catástrofe descender como nos hacen creer desde el fútbol, pero sin dudas que la idea debe estar acompañada por una organización que debería mejorar premios y castigos con una vara mas ecuánime para el desarrollo de la actividad.