No fue tan rápido, pero tampoco requirió mucho trabajo. A los 28 minutos, Independiente pudo doblegar a Cerezo Osaka y se puso 1-0 adelante en el marcador de la final de la Copa Suruga Bank, que enfrenta al último campeón de la Copa Sudamericana y al conquistador de la Liga de Japón. Fue Silvio Romero, tras algunas desinteligencias en el fondo del equipo japonés, el que definió de forma exquisita ante la salida del arquero y marcó el primer gol del partido.