El mallorquín aseguró que el tie-break del quinto set contra Thiem fue «una moneda al aire» y palpitó el duelo contra el tandilense. «Sé que ha estado jugando bien», destacó.

Rafael Nadal pasó a la semifinal del Abierto de Estados Unidos tras un duelo de casi cinco horas contra el austríaco Dominic Thiem, una victoria que, dijo, le «sabe mal» porque el desempate ha sido una «moneda al aire».

Una vez acabó el partido, al filo de las dos de la madrugada, Nadal declaró a los periodistas que el encuentro fue «especial» por sus diferentes fases, «emocionante» tanto los espectadores y los jugadores, y «positivo» para él porque su «nivel ha ido a más».

«Dominic es un compañero ejemplar dentro del circuito y me sabe mal por él. Cuando llegas a esta situación en el quinto set, el 5-5 en el tie-break es una moneda al aire», reconoció el defensor del título del Grand Slam.

«Un 6-0 es un resultado muy peligroso, quizás no si el jugador es inferior a ti, pero si no es inferior, o es superior, o de un nivel similar… En el primer set he ganado 7 puntos solo, no había partido», analizó el número uno, que podía haberse visto en una «tesitura muy desagradable» de no remontar en la segunda manga.

De cara a su semifinal contra el argentino Juan Martín del Potro, número tres del mundo, Nadal espera descansar antes del reto que le supone un oponente «duro» que juega bien en todas las superficies, según explicó.

«Sé que ha estado jugando bien así que tendré que jugar a mi nivel más alto», concluyó.