Central anotó 2 goles en los últimos 7 partidos oficiales que jugó, 5 por Superliga y 2 por Copa Argentina.

Central mejoró su imagen futbolística el último domingo en La Bombonera. De eso, no hay dudas. La pobre expresión del equipo que venía de perder por goleada ante Unión en el Gigante, quedó atrás. En el empate sin goles frente a Boca, el Canalla volvió a mostrar el orden y la concentración defensiva que tantos beneficios le brindó en las primeras fechas de la Superliga. Las de aquel arranque matemáticamente perfecto, con tres triunfos en igual cantidad de presentaciones, y sin recibir goles.

Eso sí, en ofensiva, y más allá de los retoques posicionales y de nombre que ensayó Edgardo Bauza para este encuentro, a Central le sigue costando generar. Y, en este sentido, los números son contundentes: los de Arroyito anotaron apenas 2 goles en los últimos 7 partidos jugados (5 por el torneo local de primera división y 2 por Copa Argentina).

Es cierto que en la faz de ataque también hubo una sensación de mejoría en suelo xeneize. Con el cambio de banda en el medio, se los notó más cómodos a Washington Camacho y a Federico Carrizo. Y Maximiliano Lovera, que hizo las veces de media punta, insinuó cosas interesantes.

Pero ninguno de estos retoques propuestos por Bauza provocó más situaciones de gol para el equipo. Leonardo Gil y Néstor Ortigoza siguen desconectados del circuito ofensivo. Y el único delantero, Fernando Zampedri, casi siempre quedó aislado, y recibió poco juego. Algo similar a lo que venía sucediendo cuando el Patón incluía dos puntas.

Ahora, con el Clásico copero confirmado para el jueves 1ero de noviembre en Sarandí, Bauza tendrá sólo un partido por delante para ensayar otras variantes ofensivas. Eso será el próximo domingo visitando a Patronato. Para ese encuentro hay chances de que, si cuenta con Marco Ruben a disposición, el Patón retome la idea táctica del 4-4-2, y ponga dos delanteros desde el arranque en Paraná.

La anemia ofensiva del Canalla es indisimulable. En este sentido, las tibias señales positivas esbozadas en La Boca, deben ser reforzadas cuanto antes con goles. Y el concepto está por encima de las formas en que se lleve a cabo esa búsqueda. Apunta a la necesidad de Central de encontrar una fórmula de ataque que, sin dejar de lado el orden que pregona el técnico, permita potenciar otras capacidades del equipo. Defender bien es importante, pero mejorar la generación de juego aparece hoy como un factor indispensable para que el equipo de Bauza pueda respaldar sus intenciones de ser protagonista.

Ruben entrenó normal
Los auriazules comenzaron este lunes por la mañana en Arroyo Seco con la semana de trabajo que desembocará el próximo fin de semana en el partido frente a Patronato. Eso será en Paraná, el domingo desde las 11, en cotejo correspondiente a la fecha 10 de la Superliga.

De cara a ese compromiso, Edgardo Bauza recibió este lunes una buena noticia: Marco Ruben entrenó a la par de sus compañeros. Así, el delantero dejó atrás una molestia muscular que lo afectaba desde hace unos 10 días, y que le impidió estar a disposición del Patón para el juego del domingo pasado en la Bombonera.

Otro que dejó atrás una lesión muscular fue Miguel Barbieri. El defensor, que había sufrido un desgarro en el partido ante Almagro, también practicó a pleno. Mientras que Maximiliano Lovera sólo cumplió tareas regenerativas. El formoseño terminó fatigado en La Bombonera, y por esta razón comenzó la semana de trabajos con un poco menos de exigencia que el resto de sus compañeros.

El plantel volverá a entrenar en la mañana de este martes, nuevamente en Arroyo Seco. Y así lo hará durante toda la semana, hasta el sábado, día en que por la tarde viajarán a Paraná para concentrar.

En contra de las SAD
Se viene el debate, ¿y la reforma? La semana que viene se discutirá en AFA la posibilidad de reformar el Estatuto para que los clubes afiliados puedan convertirse en SAD (Sociedades Anónimas Deportivas). Y los que tendrán que decidir el tema son 43 asambleístas que representan distintas instituciones del fútbol argentino, 22 de primera división y 21 de las categorías de ascenso e interior del país. Para que esta modificación sea aprobada es necesario contar con las dos terceras partes de los votos, es decir que con 14 que se opongan el proyecto de las SAD será dado de baja.

Rosario Central ya tiene tomada su postura al respecto, el rechazo de la propuesta. Y además de hacer conocer esa posición en el sitio oficial de la entidad (rosariocentral.com), el titular auriazul, Rodolfo Di Pollina, también lo hizo en redes sociales. Allí, Di Pollina planteó además la importancia de que, si es necesario votar el tema, se haga públicamente y con el fundamento respectivo.

A través de su cuenta de twitter, @RodoDipollina, el presidente Canalla expresó: “Los clubes nacieron y se concibieron como un espacio que une y contiene socialmente. Para quienes trabajamos para fortalecerlos, las SAD no son el camino. Como dirigentes tenemos la obligación de expresar abierta y responsablemente la postura que defendemos, por mandato de nuestros socios. En Central la posición es clara y avalada por el Estatuto: contra las SAD y a favor del rol social de los clubes. En mi opinión es importante que, de llegar a una votación por este tema, el voto sea público y fundamentado. También es importante respaldar activamente a los clubes de barrio, espacios de construcción social y cultural en pos de una sociedad más justa e inclusiva”.

De darse la reforma del estatuto que se discutirá el lunes que viene en AFA, la misma permitiría el ingreso a los clubes de capitales privados nacionales y extranjeros a través de las SAD, una forma jurídica que hoy no está permitida por la AFA y que en dos ocasiones fue rechazada para continuar con las asociaciones civiles sin fines de lucro.

El ingreso de las sociedades anónimas en el fútbol es un viejo anhelo de Mauricio Macri, quien ya lo intentó en su etapa al frente del club Boca Juniors entre 1995 y 2008. Y también se pronunció a favor de un régimen optativo desde que asumió la presidencia argentina en 2015.