El arquero djo que «ya no sirve lamentarse» y prefirió enfocarse de lleno en el partido ante Estudiantes, sin dejar de opinar de lo que vivió en la Copa Sudamericana. «Para llegar de nuevo ahí hay que ganar», afirmó

El plantel de Colón tendrá por delante, por primera vez en este semestre, una sola competencia, sin dudas la más importante, donde intentará sumar la mayor cantidad de puntos para engrosar el promedio.

Pero en el camino todavía quedan imágenes de una jornada que terminó de la manera menos esperada en Asunción. Leonardo Burián, uno de los referentes de este equipo, tomó contacto con la prensa este jueves para analizar lo que dejó la final de la Sudamericana y lo que asoma en el horizonte.

En el inicio expresó que «no tenemos que hacernos ningún reproche, hicimos lo mejor posible durante toda la Copa, lamentablemente en el último partido no se jugó como se lo venía haciendo, la gente de Colón lo disfrutó mucho, lo más destacable es la movida».

Y más adelante, resaltó: «No hay tiempo para lamentarse y hay que salir adelante y a ganar, estos doce puntos son muy importantes, para ganar los dos partidos de local y sumar afuera, algo que nos está faltando».

Este paréntesis, de acuerdo al pensamiento del golero uruguayo, sirvió para «desenchufarnos un poco, de la final, del viaje, fue un desgaste muy grande el que hicimos en este semestre, hubo mucho trajín. Uno aprovechó para disfrutar con la familia y esta semana nos pusimos a pensar y trabajar de lleno en Estudiantes».

Burián puntualizó que «a cualquiera le cuesta salir de lo que fue esa derrota, era la ilusión de todos nosotros poder salir campeón, de toda una ciudad. No hay tiempos para lamentos y hay que pensar en Estudiantes. Yo tengo contrato con Colón hasta mitad de 2021, hace que queda bastante tiempo».

Cuando se metió en la próxima estación donde pisará el Brigadier López un equipo entonado como Estudiantes, el custodio del arco sabalero admitió: «Tienen como una de sus principales armas la pelota parada, jugadores altos y que vienen jugando juntos hace mucho tiempo, además es un rival directo en cuanto a los puntos, por eso es primordial ganar».

En otro tramo de la charla, cuando debió nuevamente referirse al semblante del grupo, el uno rojinegro dijo que «el vestuario y las horas posteriores fueron de tristeza, desacón, un poco de angustia. Cada uno estuvo con su familia, algunos se quedaron en el hotel, otros salieron a cenar afuera. Hablamos mucho entre nosotros y el cuerpo técnico, no con los coachings, comentamos lo sucedido, pero lamentarse no vale la pena y si queremos volver a esa situación hay que ganar».

Hace pocos días se dio una situación particular con un hincha, que le puso Burían como nombre a su bebé, algo que llamó también la atención para el uruguayo. Al respecto, acotó: «Me enteré cuando estaba viajando a Uruguay, me mandaron una captura de pantalla, son cosas que genera el fútbol, la pasión, se sacó una foto antes de que nazca y me dijo que si salíamos campeones le iba a poner así a su hijo. No pudimos hacerlo pero igual cumplió».

Antes de su despedida le dedicó un párrafo especial a los hinchas sabaleros, al expresar que «después de todo lo que generó el hincha de Colón hay que sacarse el sombrero y estamos muy felices, se que vivieron más allá del resultado una jornada histórica para ellos y lo fue también para nosotros».