El presidente en su regreso al país se juntó con el delantero, con quien llegó a un acuerdo sobre la incertidumbre que generó tras la final de la Sudamericana.

Una de las primeras acciones que tuvo el presidente José Vignatti cuando volvió a nuestro país, luego de estar por algunas semanas en el exterior, fue reunirse con Luis Miguel Rodríguez.

Es que Pulga protagonizó una intensa novela desde el pasado sábado 9 de noviembre, cuando Colón perdió la final de la Copa Sudamericana ante Independiente del Valle. El tucumano dejó picando la chance de marcharse del club y que era una decisión que estaba analizando con su familia.

En similares términos se refirió luego del partido ante Estudiantes, donde convirtió dos tantos y brindó una asistencia para la victoria por 3-2, en el estadio Brigadier Estanislao López.

En una conferencia que dio en la semana posterior nuevamente dejó abierta la chance de marcharse y lo argumentó debido a inconvenientes particulares y familiares que atravesó en 2019, como fue el fallecimiento de su padre.

Pero luego Pulga tuvo un intercambio verbal con algunos plateistas en el partido ante Aldosivi y no jugó el último ante Arsenal, acusando un inconveniente físico, y en dicho día se lo vio ya en Tucumán junto al vicegobernador de la provincia y en una producción televisiva que realizó en el campo de juego de Atlético.

Su hermano Walter también se refirió a su posible regreso a Atlético Tucumán y dijo que había un 60% de posibilidades de hacerlo, lo que sembró aún más la incertidumbre debido a que también hace las veces de representante junto a Roberto San Juan.

Pero Rodríguez estuvo en Santa Fe para el inicio de la pretemporada y de a poco los rumores sobre un posible alejamiento se fueron alejando, más allá que desde Tucumán se comenzó a hablar que podría ingresar en una negociación con Bruno Bianchi, cuestión que no fue tal.

Y en el encuentro que tuvieron Vignatti y Pulga, se definieron varias cuestiones para garantizar la continuidad del jugador. Se acordó una deuda que el club mantenía con él, en tanto que también se reformularon los objetivos deportivos y también los económicos, debido a que tuvo una actualización de su salario debido a la abrupta subida de dólar.

De esta manera quedó asegurado que Rodríguez seguirá en el plantel sabalero como mínimo hasta que se cierre la temporada, ya que el jugador sigue manteniendo su deseo de regresar a Tucumán.