El preparador físico de Unión, Hugo Díaz, ponderó la actitud del plantel en un contexto complicado, destacando la predisposición para llevar adelante los trabajos diarios.

Los preparadores físicos son los grandes protagonistas por estos días, ya que los técnicos poco pueden hacer al no tener a los jugadores cerca para llevar adelante las cuestiones tácticas y técnicas. Por lo cual, la actividad de los futbolistas pasa por la cuestión física y el diseño de trabajo que le acercan los preparadores físicos de cada club.

En el caso de Unión se da una particularidad, ya que en la semana previa al debut de la Copa de la Superliga, renunció Leonardo Madelón y en consecuencia el técnico de Primera División fue Marcelo Mosset quien estuvo acompañado por Hugo Díaz y Rodrigo Llinas.

Así las cosas, en este parate por el momento el que maneja las rutinas de trabajo es justamente el PF Hugo Díaz elogió a los jugadores por la manera en que vienen llevando adelante su rutina diaria y la predisposición con la que cuenta pese a haber trabajado muy poco con ellos.

«Es un momento muy particular para todos, es una instancia que nos toca reinventarnos, yo hace cinco años que estoy en Unión, conozco mucho a los chicos, por mi rol me toca hacer de compañero, de profe, a veces de amigo. Vamos charlando e intentando sacar la mejor versión de cada uno, no es fácil estar encerrado con el estrés que genera», comenzó explicando.

Respecto a la planificación y a las rutinas que le brinda a los jugadores detalló: «En cuánto a la planificación cambia mucho si vive en una casa o departamento, pero también tiene que ver con las características personales de cada jugador. Algunos necesitan solo un mensaje y otros una videollamada».

Y agregó: «Algunos te dicen tranquilo yo lo hago y cualquier cosa te pregunto, pero otros necesitan estar más acompañados, pero es algo que no me sorprende para nada, ya que el plantel es una familia y vos sabes quién puede estar más sensible o necesite su espacio. Si estamos juntos se hace más fácil, pero así es muy complicado».

A la hora de mencionar ejemplos particulares expresó: «Walter Bou cuenta con un espacio grande dónde vive y el mismo soldó y armó su propio espacio de entrenamiento, es increíble la humildad que tienen estos jugadores y el esfuerzo que hacen no es fácil».

«Nosotros también estamos unidos dentro del cuerpo técnico, nos hablamos para ver si todos están bien, si la familia está bien. La única manera que sabemos que nos va a bien es tirando todos para el mismo lado. Hemos entendido que sino actuamos como familia, no nos va a ir bien, es el valor más grande que tenemos», aseguró.

Ya en el tramo final de la nota contó: «Tengo en un Excel para saber cuántas veces hablé con cada uno y cuántos vídeos me mandaron. Eso me permite tener un control de a quién necesito hablarlo un poco más o no, para que no se caiga ninguno, ese es nuestro rol».

Y finalizó: «Me da cosa dar nombres propios, pero el mugre Corvalan es otra persona que tira para adelante, también Moyano, Assis, Cabrera, Mazzola, los más grandes tiran del carro como loco. Se me pone la piel de gallina de pelear al lado de estos soldados».