Lo expresó desde Brasil la talentosa nadadora santafesina Julia Sebastián, quien pasó de residir en Santos a hacerlo en Minas Gerais.

La nadadora santafesina formada en el Club Regatas de Santa Fe tuvo un 2019 inolvidable. Logró la clasificación a los Juegos Olímpicos de Tokio que finalmente se llevarán a cabo en 2021. Fue catalogada la más eficiente nadadora en Brasil en la temporada pasada. Con 26 años la gran nadadora de nuestro país, realizó un cambio importante. Pasó de la University Santa Cecilia ubicada en Santos a Minas Tenis Club de Minas Gerais.

Al igual que en casi en todo el mundo, Brasil no fue ajeno a la suspensión de las actividades deportivas producto de la pandemia de coronavirus. La cuarentena también afectó a la natación en el vecino país, y los lugares de entrenamientos fueron cerrados, y las competencias deportivas suspendidas.

«La cuarentena la estoy llevando bastante bien. Las dos primeras semanas nos pidieron que nos calmemos, que no entrenemos, y que ibamos a entrar en receso porque sino no había tiempo para desentrenarnos y volver al ritmo habitual. Hicmos treinta semanas y no paramos. Entonces no podíamos hacer 50 semanas, y a mi me pegó que no podía parar. Seguí entrenando durante quince días, estaba bastante motivada, no quería parar» destacó Julia Sebastián desde Brasil.

En un reportaje brindado a la AFEN la santafesina expresó que «luego me pegó una semana que no me podía mover, no podía salir del sofá, no estaba triste, no era desmotivada, no tenía ganas. Después mandaron los entrenamientos, los hice, alquilé la bici y ya entré en ritmo. Creo que me siento afortunada en muchos sentidos, y miro a futuro las cosas que se vienen. Estoy tranquila, creo que es lo principal, y esperando ver que mi jefe, mi entrenador, me diga que hacer».

Ante la consulta de como lleva la cuarentena destacó que «sigo entrenando en casa a la mañana y a la tarde, y tratando de enfocar la cabeza en cosas diferentes. Tratando de estar lo más tranquila posible porque es un momento complicado que lo está pasando todo el mundo».

«Mi cuerpo es divino, pero todo lo que no necesito el lo guarda. Entonces es una lucha constante. Por eso previo a las competencias trato de llegar en un muy buen peso, me entreno con algún kilo arriba, durante todo el proceso y más en las últimas cuatro semanas, tal vez intensifico más la bicicleta» señaló la nadadora que logró el pasaje a Tokio.

Explicó que «en Brasil todos los días trato de hacer bici, y se que para llegar al peso ideal lo necesito. Ahora en la cuarentena he cambiado mucho la alimentación, volví a hacer una dieta más normal y balanceada. El tema de la suplementación lo manejo con una nutricionista, y lo completo con proteínas. No nado hace un mes y lógicamente que trato de cuidarme, para después no tener que matarme no comiendo».

Consultada de como es normalmente sus entrenamientos, Julia, hija de un gran rugbier de la década del noventa, el Topo Mario Sebastián, expresó que «Una semanal normal de entrenamiento es así. Todos los días 7.30 tengo que hacer en el club activación y todo lo que es zona media y core. Salvo los jueves que tengo otro tipo de postural, que es para fortalacer los hombros y las articulaciones. Eso es para todo el equipo, y se trabaja los lunes, miércoles y viernes en doble turno, los martes a la mañana, y los jueves a la tarde y regenerativo. Y después gimnasio, y la media hora de bici que yo agrego por mi lado. Son ocho o nueve estímulos por semana de agua».

En Brasil es la nadadora que más puntos consiguió en la natación el año pasada. Primero fue en Unisanta y luego paso al Minas Tennis Club. Sobre este cambio contó que «viví dos años en Santos, en San Pablo, que me permitió tener una experiencia diferente. Desde el 2012 representé a Unisanta en los campeonatos nacionales, y en 2017 y 2018, fui a vivir a Santos y entrené allí con ellos. A finales del 2018 se me venció el contrato de trabajo, y por una cuestión de legalidad no pude renovar en el mismo club. Me dejaba un gusto amargo irme y me vine a Minas Gerais».

«En Minas Gerais me quedé impresionada con un club que tiene todos los deportes de alto rendimiento. No solamente en equipos sino en infraestructura. Ellos tienen un sector para fisioterapia, otro para psicología, nutrición, está la enfermería y la médica. Cuando llegué en 2019, con la idea de estudiar educación física, que empezé en San Pablo, acá tuve que dejarla un poco de lado por las distancias, y porque mi foco estaba en la natación» cerró la muy buena deportista de nuestro medio, y que forma parte de la selección nacional de natación.