El entrenador de Colón, Julio Comesaña, volvió a dar qué hablar con sus declaraciones. En este caso, con el balance que hizo en conferencia de prensa después de la derrota de este viernes por esta noche ante Banfield. Inicialmente se mostró tranquilo y muy autocrítico como siempre, pero cuando habló del rival, ahí ventiló su enojo.
«El funcionamiento de Colón fue muy pobre en los primeros 15′, jugando con una lentitud que no esperábamos y prácticamente contrastaba con la velocidad del rival. Después lo emparejamos y terminamos el primer tiempo generando profundidad por derecha. Estuvimos cerca en algunas oportunidades como para definir. En el segundo tiempo empezaron los problemas. Primero con (Guillermo) Celis, que seguramente puede tener una fractura; enseguida el tema de (Mateo) Hernández con calambres y de pronto eso nos complicó. Le dimos entrada a (Gabriel) Esparza y tuvimos que hacer otras variantes (salió Luis Rodríguez). Pero así y todo el equipo insistió y buscó. Faltó quizás un hombre más de peso adentro. El partido habría que analizarlo bien con algunas cosas en cuenta, pero será materia de charlarlo después», apuntó.
Pero luego vino lo fuerte y sorpresivo: «Hacía mucho rato que no veía un espectáculo tan vergonzoso como lo que hizo Banfield esta noche (por este viernes). Mucho más fue lo del árbitro. No es un tema técnico sino disciplinario. Los jugadores se miraron todos al suelo, hasta los suplentes me parece para hacer tiempo. Decepcionado de esa situación».
Luego, tuvo un picante ida y vuelta con los periodistas sobre la elección de los jugadores: «Si yo fuera adivino hubiera hecho otras cosas. Cuando hago el banco lo hago pensando en varias cosas, tratando de prever. (Fernando) Zuqui no jugó porque el otro día jugó por izquierda y también por derecho y yo no estaba conforme con lo que estaba haciendo. Tiene condiciones, pero tiene que ser eficaz. Esta noche (por este viernes) mostró como debe jugar siempre».
«Me pareció que jugar con tres delanteros era un disparate. A veces las cosas me resultan y otros no. Quizás esta vez no salió. Quedó claro igual que no sufrimos tanto en la recuperación, porque teníamos más la pelota. Sobre todo con el ingreso de Zuqui. Creo que el partido se jugó más en campo contrario. Pero debo reconocer que nos faltó alguien más en la llegada», resaltó.
En el final, fue contundente: «Si analizamos el partido por lo que fueron los primeros 15, está claro que no hicimos nada bien, pero después la imagen es otra. Pero es fácil hablar con la derrota, entonces tengo que ubicarme en un lugar como el mayor equilibrio posible. La procesión va por dentro y tengo que ser mesurado. Lo de hoy (por este viernes) no me gustó, porque fue de la época de los picapiedras cuando se tiraban cosas a la cancha para hacer tiempo. El fútbol se puede apreciar de otra manera». ¡Tremedo!