El Barcelona se convirtió en el octavo y último cuarto finalista de la UEFA Champions League 2018-2019 tras vencer 5-1 en casa al Olympique de Lyon.

El equipo francés llegó al encuentro con la firme intención de escribir otro episodio de sorpresa en el presente torneo, sin embargo, el poder ofensivo de los culés resolvieron el partido en menos de 30 minutos y enfilaron la victoria para los de Valverde.

Al Lyon le costó trabajo la ofensiva. Más bien planteó un partido defensivo y de suma contención para enviar que Messi, Coutinho y Suárez se salieran con la suya: misión fallida.

Lionel Messi se encargó de abrir el marcador al minuto 18 con un cobro magistral de penal. El argentino se adornó con un cobro a lo ‘Panenka’ para enfilar al Barcelona a la victoria.

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Al Lyon no solo le pegó en el ánimo el primer gol en contra, también la lesión de su portero, Anthony Lopes, quien luego de un choque ante Coutinho, debió abandonar el partido por lesión.

Con la moral hecha polvo, el Barcelona aprovechó los espacios y la velocidad de sus jugadores por las bandas. Así se tejió la jugada del segundo gol. Una obra individual de Luis Suárez quien sirvió en bandeja de plata la pelota para que Coutinho solo la empujara al fondo de las redes.

El Lyon recobró el aliento con el gol al minuto 57 tras una serie de rebotes dentro del área que el Barcelona no pudo despejar. Toussart apareció para baja el balón con el pecho, rematar con la pierna derecha y mandar guardar el balón al fondo de las redes.

El cuerpo arbitral tuvo que revisar la jugada con el videoarbitraje para validar el tanto de los franceses que los metió al partido.

Lionel Messi apareció en el momento oportuno para regresar la calma al a afición que había ahogado los gritos de apoyo a su equipo para marcar el doblete de la noche.

Con una jugada de genio, dejó en el camino a dos defensas con un recorte perfecto y disparó ante la salida del arquero para regresar la ventaja a los culés para consolidar el doblete de la noche y alcanzar, por cuarta temporada consecutiva, marcar más de 31 goles en la temporada.

Con la defensa del Lyon totalmente abierta, el Barcelona liquidó por el costado izquierdo. Primero apareció Gerard Piqué para definir una jugada de ensueño de Messi y después lo hizo Dembelé por el mismo sector, también a pase de Messi, para poner el 5-1 definitivo.

El Barcelona se mantiene asistiendo a todas las rondas de octavos de final desde la temporada 2004-2005. En la versión del año pasado quedaron eliminados en esta instancia ante La Roma.