El volante ingresó en el segundo tiempo y tuvo una situación clara para desnivel que controló Ardente. «Pensé en patear cruzado», admitió. Intentó cambiar el ritmo, buscó el desequilibrio pero no pudo ayudar a sus compañeros a quedarse con los tres puntos. Gabriel Esparza fue uno de los pocos jugadores en charlar después del empate ante San Martín y en el inicio expresó que «creo que la insistencia fue notoria, clara, intentamos siempre ir a buscar la victoria, no pudimos concretar las situaciones claras, nos vamos con un sabor amargo, mejoramos e intentamos buscar el gol, es un poco mal y estamos en falta, sabemos que merecemos pero no podemos ganar los partidos».
Más adelante opinó que «en el primer tiempo no hicimos lo que habíamos hablado en un principio, después con empuje e insistencia nos encontramos con situaciones muy claras, una fue la que me quedó a mí. Nos faltó ganar para sumar en confianza, afrontar lo que viene, seguir en el camino del trabajo porque es lo único que te va a sacar».
El ex-jugador de San Lorenzo consideró que «a veces equivocamos algunas situaciones del juego, no nos pudimos concentrar, tuvimos una semana donde plasmamos la idea del técnico, en el primer tiempo no lo pudimos hacer, intentamos más, la insistencia de ir y buscar el gol, más o menos por ese camino la idea que nos plantea el técnico».
Y antes de retirarse dio su versión de la jugada que pudo desembocar en la apertura del marcador al agregar que «desde un principio cuando me llega la pelota pensé en patear cruzado, achicó bien Ardente, hay que mejorar esas cuestiones, hubiesen servido para ganar y hay que mejorar eso»
