Tras la igualdad del domingo ante Unión, el elenco de Eduardo Domínguez sabe que deberá cambiar algunas cosas para retornar a la victoria, cuando el próximo domingo visite a Temperley. Se espera por la recuperación de Pablo Ledesma.
La cosecha de Colón como local en los últimos dos partidos no fue del todo fructífera, ya que sumó dos de seis puntos posibles, máxime si se tiene en cuenta que está peleando por ingresar a la Copa Libertadores. Pero si se tiene en cuenta que en ambos duelos los arrancó perdiendo, la sensaciones no son del todo negativas.
Algo que deberá trabajar el entrenador, Eduardo Domínguez, en la constancia entre los dos tiempos, ya que nuevamente el equipo estuvo lejos de su mejor versión en el primer tiempo, componiéndose en el complemento. Por esas cosas del destino, siempre encontró soluciones, pero la idea es evitar que esto suceda con asiduidad.
Ahora se viene Temperley, al que visitará el domingo que viene, a las 17, con el dato de que tendrá a todos a disposición, pero con la incógnita de saber si ya tendrá a Pablo Ledesma, quien viene recuperándose de una distensión en una de sus rodillas. Lo que si está claro es que el DT no lo arriesgará si no lo ve al ciento por ciento. En ese caso, la historia pasará por saber quién acompañará a Gerónimo Poblete en el medio. Ante Unión estuvo Adrián Bastía, pero el ingreso de Christian Bernardi le dio réditos.
Temas de análisis en una semana sabalera, en la recta final de un campeonato caliente desde lo emocional y que puede deparar muchas sorpresas más.