Mete cambios en el equipo, con el objetivo de encontrar equilibrio y mejor contensión, más allá de que el equipo tras cuatro fechas todavia mantiene el cero en su arco. Con una media de dos triunfos y dos empates, en orden a los que se prometieron cuerpo técnico, jugadores y dirigentes, 10 victorias y 10 empates para llegar a los 40 puntos y quedarse así en primera división.
El ingreso de Emanuel Olivera en lugar de Raúl Iberbia y de Torres por Christian Bernardi son los cambios que implementará el técnico uruguayo.
Los buenos resultados en estas cuatro fechas con el arco invicto no lo engañan a Paolo Montero y es por eso que para jugar como local ante Defensa y Justicia, el entrenador decidió modificar el sistema táctico pasando del 4-2-3-1 al 3-5-2. Si bien la novedad más importante está dada en que jugará con una línea de tres en el fondo, esta variante tiene como correlato que en la ofensiva Ismael Blanco no se sienta tan solo.
De esta manera Nicolás Silva lo acompañará en el ataque, sin la obligación de tener que retroceder en la marca, ya que para esa función estará Iván Torres, que jugará como carrilero por el sector izquierdo.
En consecuencia Olivera se parará como líbero, Germán Conti se ubicará por el sector derecho y Guillermo Ortiz por el izquierdo. Si bien por características se podría decir que ingresa un marcador central en lugar de un lateral izquierdo, este cambio de ficha más que nada tiene ver con poblar la mitad de la cancha para controlar el balón y a partir de eso tener el control del partido, ante un equipo como Defensa y Justicia que propone permanentemente, que tiene mucha movilidad y que seguramente saldrá a buscar el partido.
Justamente Colón deberá neutralizar la dinámica que posee el conjunto dirigido por Ariel Holan que tiene muchas variantes en ataque, pero que muestra deficiencias en el bloque defensivo producto de ese desbalance que muestra en pos de salir a atacar. Quizás esta cuestión sea positiva para un equipo sabalero que hasta aquí se sintió más cómodo cuando el rival lo atacó y tuvo que jugar de contra, que cuando debió ser protagonista como sucedió con Talleres más allá del resultado final.
Se sabe que Defensa juega de la misma forma en todas las canchas y ante cualquier rival y lo demostró en las últimas dos fechas en donde consiguió empatar ante Racing como visitante y frente a River en condición de local. En ambos encuentros tuvo un buen funcionamiento e hizo los méritos como para estar en igualdad de condiciones ante dos de los mejores equipos del fútbol argentino.
Ese es el antecedente más inmediato que tiene el conjunto de Florencio Varela y que intentará revalidar en su visita al Brigadier López. No en vano en las últimas horas Montero afirmó: «Sabemos que vamos a enfrentar a uno de los equipos más dinámicos del fútbol argentino, juegan muy bien al fútbol, elaboran su juego y saben a lo que juegan. Nos mediremos con uno de los mejores equipos del fútbol argentino. Eso es mejor, y ojalá que no falte nadie así si le ganás no tienen excusas sobre si les faltó alguno y otro. A mí me gusta medirme contra los mejores».
Es obvio que más allá de pensar en su equipo el técnico también evalúa lo que tiene enfrente y es por eso que pensó en cambiar. Olivera fue uno de los centrales que pidió apenas asumió en Colón ya que lo conocía de su paso por Boca Unidos y que no lo tuvo en cuenta en los primeros dos partidos porque acarreaba una suspensión.
En los últimos dos fue al banco y ahora tendrá la chance de ser titular. Siempre una línea de tres genera dudas si no está bien aceitada y eso lleva tiempo, pero también es cierto que el cuerpo técnico trabajó este sistema durante la pretemporada como para desarrollarlo durante la competencia. De todos modos la presencia de Lucas Ceballos como carrilero por derecha hace que inmediatamente esa línea de tres se pueda convertir en línea de cuatro al retroceder ya que por características el ex-Godoy Cruz es un lateral.
No obstante el objetivo no es precisamente que los futbolistas deban retroceder sino que planten bandera en la mitad de la cancha para comenzar a ganar el duelo, ya que en el último partido con San Martín de San Juan y gran parte del cotejo ante Talleres, al elenco rojinegro le manejaron con mucha facilidad el balón.
Y además Defensa se caracteriza por tratar de jugar siempre con el balón, ya que tiene movimientos muy bien coordinados y sabe cómo llegar a posición de gol. Por allí no tiene demasiada contundencia, aún contando los tres tantos que le marcó a River. Pero sin dudas que lo mejor que tiene es el funcionamiento colectivo.
Lejos está Defensa de ser un equipo imbatible o un cuco, porque si se toman en cuenta los números habrá que decir que suma tres empates y una derrota. Pero también es cierto que empató con Rosario Central, Racing y River y perdió con San Lorenzo. Un fixture complicadísimo en el arranque. De todas maneras si bien será un partido muy difícil para Colón, dependerá mucho de lo que pueda desarrollar el elenco sabalero y de que pueda imponer condiciones para que el encuentro se desarrolle como quieren los de Montero y no los de Holan. Dos estilos distintos que este domingo se pondrán a prueba.