El N°10 de Barcelona discutió con un rival en los pasillos del estadio; lo tuvo que tranquilizar el Kun Agüero, que luego dio su versión de los hechos.
Leo Messi tuvo una noche de humores cambiantes en esta ciudad, donde su equipo, Barcelona, perdió 3-1 frente al City, por la fecha 4 del Grupo C de la Champions League. Primero, tras el gol para abrir el marcador, la felicidad invadió su rostro, como presagiando otro gran partido. Pero luego, con la remontada del conjunto de Pep Guardiola y de varios cruces entre los jugadores dentro de la cancha, la furia se apoderó del N°10. La Pulga terminó discutiendo en en el túnel del estadio y, de no ser por la actitud conciliadora de Sergio Agüero , podría haber protagonizado un escándalo.
Cuando el árbitro marcó el final del partido, y la alegría se tiñó de celeste, los jugadores de Barcelona sucumbieron ante la desazón. Y fue camino al vestuario cuando sucedió el incidente. Según reflejan todos los medios de España, un jugador del City -nadie especifica cuál- insultó a Messi, que se fue de sí. Leo lo increpó y le gritó: «Bobo, vení acá y da la cara». La noticia, publicada inicialmente por Cadena Ser, asegura que la Pulga estaba tan enojado que fue hasta al vestuario del City en busca del jugador. Lo acompañaba Carles Nadal, delegado del club, en una actitud más pacifista. En ese momento, salió el Kun, que logró tranquilizarlo.
En las charlas con los medios, ningún jugador quiso hablar del incidente, aunque las declaraciones de Agüero confirmaron que sucedió. «He escuchado algo. Vi a Leo enojado pero yo llegué último. No sé qué pasó».