Carlos Berlocq jugó un partido perfecto y avanzó a los cuartos de final del Argentina Open tras haber conseguido un gran triunfo ante el español David Ferrer por 6-4 y 6-2, que además lo dejó como el único tenista argentino entre los ocho mejores del torneo.
Berlocq, nacido en Chascomús y ubicado en el puesto 77 del ranking mundial de la ATP, consumó su victoria sobre Ferrer (27) en una hora y 25 minutos, ante unas escasas mil personas que se acercaron hasta el Buenos Aires Lawn Tennis Club, en el barrio porteño de Palermo.
El argentino, quien ingresó al torneo merced a un ‘wild card’ y había superado en la ronda inicial al eslovaco Josef Kovalik (121), se sacó de encima con llamativa facilidad a Ferrer, tres veces campeón en Buenos Aires (2012, 2013 y 2014), y mañana irá por más ante el brasileño Thiago Monteiro (84) o el catalán Tommy Robredo (550).
Berlocq, con el impulso de la enorme confianza que le dio su reciente actuación en la Copa Davis ante Italia (ganó el dobles junto a Leo Mayer y un single maratónico), pese a que se perdió esa serie en el Parque Sarmiento, salió a jugar con mucha actitud y dominó de entrada al español.
El «Gladiador», de 34 años, aprovechó que Ferrer fallaba con su servicio y lo quebró de entrada (1-0 luego de una doble falta) y con esa ventaja se soltó para redondear un gran primer set, con la táctica de moverlo hacia los costados para generar errores y después castigarlo de derecha y también de revés.
El argentino se puso al frente 5-4 y sacó 40-0, en ese momento pareció que Ferrer reaccionaba ya que levantó los tres sets points en contra, pero Berlocq insistió y lo definió por 6-4 con un revés paralelo perfecto que desató la primera gran ovación del público en el estadio.
En el segundo parcial, Berlocq quebró de nuevo en el primer game y supo administrar esa ventaja, en un partido de largos peloteos, con ambos plantados desde el fondo.
El «Gladiador», siempre con la iniciativa y jugando profundo (así mantuvo a su rival a la defensiva), no falló jamás con su servicio, eso le transmitió mucha seguridad, y también estuvo acertado en la devolución, lo que le reportó otro quiebre para estirar a ventaja a 4-1, y luego a 5-1 con la victoria cada vez más cercana.
En ese momento, a Berlocq le quedaba lo más difícil, que era cerrar el partido ante un tenista de categoría que fue tercero en el ranking mundial y que aún a sus 34 años inspira respeto, sobre todo en polvo de ladrillo.
El argentino sacó muy bien en el último punto y se puso 40-30 para sellar su victoria con el enésimo drop al que Ferrer llegó muy forzado, casi agachándose, y lo dejó en la red para sentenciar el 6-2 definitivo.
Berlocq apretó su puño y festejó un rato largo en la cancha, porque está entre los ocho mejores del torneo y además se trató de un éxito importante, más allá de que el actual Ferrer es la sombra de aquel ‘top ten’ que frustró dos veces a la Argentina en finales de la Davis, en 2008 en Mar del Plata y en 2011 en Sevilla.
El «Gladiador» continuará adelante este viernes desde las 21 con la misión de igualar su mejor actuación en Buenos Aires, que fue en 2015 cuando trepó hasta las semifinales y claudicó ante el enorme «Rafa» Nadal, luego campeón del torneo.