Los visitantes ganaron por 2-1, con goles de Rafinha y el delantero argentino; Diego Godín había puesto el 1-1 parcial en el estadio Vicente Calderón.
Barcelona consiguió un triunfo vital ante Atlético de Madrid. en el estadio Vicente Calderón, un gol de Lionel Messi sobre el final estableció el 2-1 definitivo para los catalanes, que no se sintieron cómodos en ningún momento del juego. Por eso, también, valió tanto la victoria: la aparición del mejor futbolista del mundo les permitió a los catalanes destrabar lo que parecía un empate cantado.
En un partido parejo, dominado al principio por el equipo local, el primer gol del partido llegó recién a los 19 minutos del segundo tiempo, cuando Rafinha encontró una pelota tras una serie de rebotes y la mandó adentro desde el borde del área chica.
Hasta ese momento, el equipo local había maniatado a Barcelona e incluso había generado ocasiones de gol, sobre todo en el primer tiempo. Messi, bien custodiado, apenas había tenido una oportunidad clara en un tiro libre que desvió Oblak, el arquero esloveno que vuelve a jugar en este partido después de recuperarse de una lesión.
Pero no tardó el equipo de Simeone en llegar al empate: seis minutos después del gol de Rafinha, Diego Godín cabeceó un centro de Koke y la pelota superó la salida de Ter Stegen. Así, el partido entró en su fase decisiva con el 1-1 en el marcador.
Y a los 41, Barcelona sacó ventajas de su as de espadas: apareció Messi por el centro del área, tomó un pase de Luis Suárez y remató de derecha, la pelota rebotó en Savic y el argentino volvió a meter su pie: con un toque de zurda metió la pelota en el arco para que los catalanes se pusieran 2-1. Fue suficiente: el equipo de Simeone ya no tuvo fuerzas para volver a levantarse.
Messi, siempre Messi. Por él, como tantas veces, Barcelona ganó un partido en el Vicente Calderón. Y sigue prendido en la pelea por el campeonato con Real Madrid y Sevilla.