El entrenador de Junior de Barranquilla ponderó las virtudes del rival que tendrán por los 8vos de final de la Copa Sudamericana. «Juega de acuerdo a lo que pretende su entrenador»; enfatizó.
Junior de Barranquilla será el próximo escollo de Colón a nivel internacional. Para los sabaleros será también una nueva experiencia de conocer un país sudamericano que aún no pisó en competencias de ese calibre.
El elenco cafetero perdió el pasado fin de semana su invicto en el certamen al caer 2-1 frente a Boyacá Chicó. De todas maneras con 11 puntos se ubica tercero, a cuatro del líder La Equidad. Julio Comesaña es un prócer en Junior, a tal punto de atravesar el octavo proceso al comando del equipo.
El DT charló en La Radio del Fútbol en Santa Fe (FM 96.7) y en el inicio se atrevió a expresar que «tuvimos un buen arranque, esperamos mejorar el funcionamiento del equipo y con resultados favorables. Es mi octavo paso por Junior, muchas historias, un paso que en el análisis detallado tiene cosas interesantes para los que estamos en el fútbol cuando uno mira para atrás se da cuenta de lo bueno y malo, es mi casa estoy bien y contento».
Lejos de estar ajeno a la cuestión, el interés por conocer el rival en la Copa Sudamericana lo llevó a reconocer que «con la tecnología siempre vemos los partidos, el detalle, hay dos empresas que nos atienden en ese tema y los compañeros del cuerpo técnico, es mi trabajo, estuvimos pendientes de Colón y San Pablo, y el próximo rival nuestro».
Con 70 años el estratega uruguayo es uno de los más longevos en el fútbol sudamericano, a lo que el propio protagonista se encargó de detallar que «siempre si uno a la edad la aprovecha para mantenerse actualizado y para crecer cada día y aprovechar las experiencias es indudable que uno se fortalece, la gente joven que tiene ganas de lograr cosas también se prepara y tiene el vigor que le da la juventud, cada etapa de la vida tiene sus cosas buenas y en tanto se quiera renovar y con ganas de levantarse y ver de donde viene y para donde va, ni la juventud ni muy maduro cuando uno quiere superarse puede avanzar».
Para muchos de los que presenciaron el sorteo y veían de reojo la serie, está claro que San Pablo era favorito para eliminar a Colón. De acuerdo al análisis de Comesaña, el pasaporte del rojinegro «me llamó la atención, se que es un equipo que estaba tratando de organizarse y construir el equipo, el técnico mostró con Huracán cosas importantes, lo recuerdo clarito y ahora llama la atención porque dice San Pablo, la historia, todo lo que representa, los equipos tienen sus momentos, a veces hay generaciones muy buenas, en otras queda el prestigio, se encontró con un Colón que me llamó poderosamente la atención, jugó un partido muy cerrado, muy eficaz defensivamente hablando, atacó muy poco y encontró en un remate el triunfo para ganar el partido, después mucha gente esperaba un Colón arrollador y sin embargo tomó una medida inteligente, prácticamente hizo el mismo de visita, y le dio pocas posibilidades, hacen un gol de media distancia, y después yo no recuerdo que San Pablo haya tenido algún remate, Colón tuvo algunos contraataques y asustó a San Pablo, tiene un estilo definido, es un equipo incómodo, difícil y juega dentro de lo que juega de acuerdo a lo que tiene el entrenador, es un equipo difícil».
El entrenador de Junior es consciente que los planteos están atados al material con el que cuenta cada rival, por eso no extrañó cuando dijo que «a veces quisiera saber qué es ser defensivo, a la manera de atacar está ligada con el material humano que se tiene, a veces hay gente que quiere hacer juego de posesión y no lo tiene, Colón por ahí no tiene ataques elaborados, es un equipo con jugadores para contraatacar, hay que defender bien y atacar mejor, ahí está el arte del entrenador».
En la parte final dio su punto de vista respecto a poder contar con Teo Gutiérrez, uno de los jugadores más jerarquizados que tiene en su equipo. Al respecto, enfatizó: «Lo conozco desde que empezó allá por 2008, lo pusimos de titular, en aquel momento dijimos que es el mejor lejos, no nos equivocamos, es un centrodelantero diferente, no es grandote o está metido en al área, su andar por muchos lugares tuvo dificultades con compartamientos que se le reprocharon, mucha gente no sabe lo que es andar en diferentes países, culturas, donde el jugador colombiano no tenía credibilidad, y es una persona con carácter, temperamento, por ahí reacciona, a alguna gente no le gusta, como jugador en el cancha uno lo quisiera tener siempre».