Chapu junto al plantel de Regatas
El “Chapu” Andrés Nocioni sorprendió a propios y extraños. Su amistad con el entrenador de Regatas Corrientes, Lucas Victoriano, lo hizo desembarcar en el parque Mitre, y allí produjo literalmente una revolución.
Una jornada en donde las vivencias, los recuerdos, las anécdotas, los momentos de gloria de la “Generación Dorada” fueron el común denominador primero en el estadio de los “Sueños” y después en el Club Córdoba, con los minis.
El dirigente regatense, Emilio Lanari, junto al plantel, staff técnico y otros dirigentes le obsequió una camiseta y una remera oficial del Club, con fotos de rigor de por medio –se paró obvió el entrenamiento-, en donde todos querían la instantánea para la posteridad.
Así se sumaron Victoriano, Paolo Quinteros, Marco Giordano, Tayavek Gallizzi, y Sergio Saiz, en realidad todos, para el aplauso instantáneo en un momento muy emotivo entre el “Chapu” y el plantel “remero”.
Abusando de su generosidad, predisposición y humildad, la dirigencia regatense lo invitó a participar del encuentro de mini que Regatas Corrientes tenía con Córdoba, para allí tener un ida y vuelta con los pibes.
“Yo empecé a jugar al básquet a los 5 años y mi primer doble lo hice a los 11”, comenzó diciendo el “Chapu” Nocioni entre risas a los minis en el club Córdoba. “Era muy malo. No metía una, la pelota me pegaba en al cabeza, me caía…”, agregó.
“Pero yo nunca deje de picar la pelota. Nunca baje los brazos. Siempre iba al club, hasta que metí mi primer doble, a los once años, y después vino otro, y otro, hasta transforme en jugador profesional”, siguió comentando.
“Por eso estoy hoy acá. Porque cuando yo era como Uds. nunca tuve la posibilidad de que un jugador me hable, me cuente, me transmita esto del básquet, de insistir hasta que la chispa prenda. De eso se trata”, argumentó.
“Yo les diría que se diviertan jugando al básquet, y para eso no sirve que uno, o dos la estén pasando bien y los otros no. Hay que pasarse la pelota para que todos estén contentos, y porque hay que entender que el básquet es un juego en equipo”, finalizó para luego continuar con las requisitorias de los pequeños.
Así un día el “Chapu” Andrés Nocioni, uno de los emblemas de la “Generación Dorada”, sorprendió a propios y extraños, en una verdadera revolución, transformado la genial frase del Chapulín Colorado que inmortalizó Roberto Gómez Bolaños en ¡No contaban con mi presencia!…
Informe: Prensa Regatas