El DT de Unión fue contundente y admitió después de la derrota ante San Martín (SJ) es momento de «reinventar todo» pensando en el futuro.
«Venimos a buscar otro resultado, pero nos vamos con las manos vacías. Estábamos bien hasta el gol, donde cometemos un error. Después nos costó en la adversidad. No tuvimos la contundencia necesaria y cuando nos dieron el segundo golpe casi que nos entregamos. Nos vamos dolidos. Es una pena, porque estamos cerrando mal el año». Así de sincero fue el entrenador de Unión, Leonardo Madelón, al término del partido con derrota de este lunes ante San Martín de San Juan por 2-0.
Después de saludar a su colega Rubén Forestello, el DT rojiblanco se acercó a los medios santafesinos y, antes que nada, dejó en claro que iba a ser breve. «No nos gusta esto. Cuando íbamos segundos (en la Superliga) nunca dije que pelearíamos el campeonato. Siempre fui mesurado y ahora las cosas no nos están saliendo. Habrá que cambiar la forma de llegarle a los jugadores. El parate nos perjudicó, pero no es excusa y por eso pienso ahora solo en cerrar el año con una victoria».
«Era un partido para ganarlo, pero ellos fueron más efectivos y nos ganaron. Arrancamos peleando el partido bien. En el segundo tiempo les dije (a los jugadores) que tenían 10′ de rebeldía y los chicos la tuvieron, pero erramos goles. La realidad indica que antes llegábamos menos y marcábamos y ahora la cosa cambió. Cuando perdés cuesta dar explicaciones. Nos ganó bien San Juan y a otra cosa», agregó el estratega tatengue.
Siguiendo con la radiografía actual, apuntó: «Son fallas individuales. Estábamos bien aplicados y hubo un desentendido en el primer gol. Ahí la cabeza quedó golpeada y nos costó entrar en partido. Tengo que reinventar todo, hablar y llegarle a los jugadores. Hay que hacer todo ahora para ganar el sábado. Banfield es bravísimo y tenemos que cambiar esta imagen con un triunfo».
En el final, fue honesto: «Hay jugadores que vienen con mucho cansancio de todo el semestre. Algunos ya con la cabeza más pensando en el final y la realidad nos está pegando cada fin de semana. No es que somos un cachivache, porque hace más de un mes que bajamos el rendimiento. Ojalá podamos terminar bien con nuestra gente el próximo sábado».