El DT reveló cómo puede darse la revancha ante el Darsenero y destacó que «el desesperarse puede ser un arma de doble filo».
Colón tiene la cabeza puesta pura y exclusivamente en el partido de este martes a las 19.15 frente a River Plate de Uruguay, en la revancha de la Fase 2 de la Copa Sudamericana, tras el empate sin goles que se registró en el Centenario de Montevideo.
Pablo Lavallén fue uno de los que atendió a la prensa en el día previo al último partido de la temporada, que será clave para el nuevo proyecto deportivo de Colón, ya que determinará sus objetivos futuros y también condicionará el mercado de pases.
En el inicio de la charla el técnico se refirió al partido de este martes, y dijo: «Ya conocemos al rival, lo habíamos visto, lo enfrentamos y confirmamos lo que podía pasar en Uruguay. No hicimos un buen partido, lo sabemos que quedamos en deuda con nosotros mismos y con la gente. Ahora tenemos una nueva posibilidad ante un rival que será más peligroso que en Uruguay, de esa forma eliminó a Santos, nosotros tenemos que estar fuertes, la gente será un factor determinante para hacer sentir esa presión que también la puso en Montevideo, donde no se nos dio un buen partido».
Y agregó: «Es el último partido de la temporada, donde hay mucho por ganar y si hacemos un buen partido tendremos muchas chances de pasar, que es lo que todos queremos».
En cuanto a si tiene definido el equipo, adelantó: «Lo tengo resuelto, mañana (por este martes) se van a enterar, hay especulaciones. Pero ya está, cuando terminó el primer partido uno ya empezó a pensar cómo jugar en la vuelta. En la semana había que esperar que estén todos bien y disponibles. Será un partido determinante, si intentamos ser protagonistas en Uruguay a ese rol lo tendremos que asumir desde el minuto cero en nuestra cancha. Necesitamos hacer un partido con mucha tensión, ser contundentes y estar concentrados durante los 95 minutos que dure el partido».
También se le preguntó qué piensa que puede llegar a plantear el rival en el Brigadier López, y destacó: «Vamos a encontrar a un rival más replegado que el que encontramos en Montevideo, haciéndonos muy difícil el filtrar pelotas y tener tiempo y espacios para estar solos y buscar un buen pase, o conectarnos. Trabajamos muchos sobre el estilo de partido que se puede dar, muchas veces tendremos la pelota y nos vamos a frustrar por cómo se van a cerrar. El desesperarse puede ser un arma de doble filo, uno está con la necesidad de hacer un gol. Pero hay que ser conscientes que ellos ganan mucho más si convierten. Trabajamos en el escenario posible y vimos que de a poco puede darse lo que se hizo, no hay sorpresas y sabemos con lo que nos podemos encontrar. No será nada fácil, necesitamos estar al 100%, recalco el peso que va a tener la gente».
En cuanto a si interesa pasar de fase dejando una buena imagen, opinó: «En el fútbol no existe la justicia, quizás para nosotros los entrenadores muchas veces analizamos los funcionamientos, pero se lo hace en base al torneo que se está afrontando, no es lo mismo tenerlo las primera fechas que estar en la fecha 39 o 40 donde se está definiendo el torneo. En este tipo de competencias lo que más sirve es el resultado, y si está acompañado con una idea de juego que fortalezca la cabeza de los jugadores mucho mejor. No es lo mismo ganar de casualidad que hacerlo bien, pero en este momento solo sirve el resultado».
En otro tramo se le preguntó por el retorno de Tomás Sandoval a la lista de convocados y los motivos por los cuales no estuvo en Montevideo, y tiró: «Es una decisión y a las decisiones las tomo con mi cuerpo técnico. Leguizamón había hecho un buen partido con Tigre, venía metiendo goles. A Uruguay viajamos en vuelo chárter, con una capacidad para llevar jugadores, hay que elegir. Ahora están los dos convocados y esperemos que todos puedan poner su granito de arena para poder ganar».
Sobre la mayor presencia de atacantes en la lista de convocados, dijo: «El plantel no tiene demasiados delanteros, tiene muchos volantes ofensivos y defensores. No hay muchas variantes, estamos a fin de temporada, hubo lesiones, cansancios y situaciones que a veces hacen que algunos jugadores no estén óptimos para jugar, y algunos no vienen en su mejor momento físico, o presentan dolencias. A ese tipo de cuestiones las analizamos, por lo cual buscamos que los jugadores que estén para jugar lo hagan lo más cerca del 100% de sus posibilidades».
Sobre una hipotética definición por penales (si la revancha también termina 0-0), afirmó: «Poder replicar una definición por penales en cualquier competencia sin público o el rival es imposible, sí se puede practicar para que el jugador comience a crear automatismos. Todos tienen información de los pateadores y el jugador lo sabe. Se puede practicar y mejorar la técnica, pero el hecho de estar ahí adentro es algo que no se puede replicar y por eso no se puede practicar. Lleva una carga emotiva que por más que metas 100 penales en un entrenamiento, ese penal es totalmente distinto».
En otro tramo se le preguntó cómo recibió la información que Francisco Ferraro será el manager del club, y opinó: «Estuvimos con Pancho hablando hace dos días, nos juntamos con el presidente. Se dio la reunión, para mí es un puesto vital, que hacía falta. Ambos nos pusimos a disposición del otro, tiene mucho recorrido en el fútbol y en el club, dirigió y jugó muchos años, llegó a selecciones, Viene a aportar su experiencia, y nosotros estamos encantados de que se sume. Es un puesto que le da el club, pero también le abrí las puertas del cuerpo técnico para que opine y dé su punto de vista. Tiene muchos años y vivencias, nosotros somos más jóvenes y tenemos que aprender. Es un gran acierto que le hará muy bien al club».
Sobre una hipotética definición por penales, dijo: «Poder replicar una definición por penales en cualquier competencia sin público o el rival es imposible, sí se puede practuicar para que el jugador comience a crear automatismos. Todos tienen información de los pateadores y el jugador lo sabe. Se puede practicar y mejorar la técnica, pero el hecho de estar ahí adentro es algo que no se puede replicar y por eso no se puede practicar. Lleva una carga emotiva que por más que metas 100 penales en un entrenamiento, ese penal es totalmente distinto».