El entrenador de Colón plantará una formación similar a la que visitó a Lanús, con los titulares ya enfocados en la final de la Copa Sudamericana. El examen de riesgo parecido a Independiente del Valle para Colón era River. Lo aguantó hasta el inicio del segundo tiempo pero esos dos goles inclinaron la balanza en favor del campeón de América.
En el trámite lo que proyectó Lavallén, y que ratificó en las declaraciones posteriores, era medirse con un equipo similar al que tendrá enfrente el 9 de noviembre en Asunción.
Pero con Luis Rodríguez reservado, Colón sabe que tendrá que cumplir con el compromiso de jugar un partido oficial de Superliga, porque la cabeza de este plantel ya está focalizada en el partido de La Olla.
Entonces, en estos entrenamientos que restan antes de recibir al Decano, la intención del orientador es poner el equipo más respetable que pueda competir ante un adversario que llega entonado luego de tres victorias en fila.
Al estar a la vuelta de la esquina el partido más importante en los 114 años de historia hacen que no arriesgue nada, aún a sabiendas que Colón no puede darse el lujo de desatender el torneo doméstico, donde su promedio es flaco.
Este jueves comenzó el orientador rojinegro a pensar en un once titular que salga a la cancha el domingo, en el paso preliminar a la final de la Copa Sudamericana.
La formación inicial estará plagada de caras juveniles más aquellos futbolistas que no son titulares en la consideración del propio Lavallén. Lejos de confirmarlo, un tentativo elenco inicial podría ser con: Ignacio Chicco; Gastón Díaz, Lucas Acevedo, Damián Schmidt, Franco Quiroz; Santiago Pierotti, Matías Fritzler, Brian Farioli; Mauro Da Luz, Nicolás Leguizamón, Tomás Chancalay.
Con este panorama, el banco de suplentes podría estar integrado por Joaquín Hass, Facundo Garces, Eric Meza, Tomás Moschión, Facundo Farías, Juan Cruz Zurbriggen y Jorge Ortega.