El ex-entrenador sabalero habló sobre las diferencias que existieron con los dirigentes durante su estadía en Colón.
En las últimas horas Pablo Lavallén volvió a dialogar con la prensa, aunque lo hizo en medios nacionales. Recordando que luego de la derrota de Colón ante Aldosivi, dio un paso al costado, pero ese día no habló en conferencia de prensa.
Tres semanas después, charló con CNN Radio y allí lo consultaron por su relación con los dirigentes, teniendo en cuenta que muchas veces salió a la luz las diferencias existentes entre el presidente José Vignatti y el entrenador.
«La dirigencia pensaba de una forma y yo soy de otra generación, el fútbol ha cambiado y yo no puedo meterme en los manejos del club. No coincidíamos en la visión deportiva que ellos tenían del fútbol y yo no coincidía en como ellos querían llevar adelante el proyecto deportivo. Fuimos teniendo ese tipo de ida y vuelta, mientras los resultados se dieron se llevó bien la relación y cuando los resultados no se dieron las diferencias fueron más grandes». comenzó explicando.
Para luego agregar «Trabajé con comodidad porque mi trabajo consistía en manejar un grupo de profesionales que en todo momento me respondió. Tuvimos un muy buen día a día, por eso estuvimos nueve meses al frente del plantel, la relación entre cuerpo técnico y plantel es vital para cualquier ciclo deportivo. Si un entrenador no se entiende con los jugadores tiene poco futuro, son los que te bancan dentro de la cancha. Y el ambiente de laburo era muy bueno más allá de las diferencias con los dirigentes».
Y en otro tramo de la charla se volvió a referir al vínculo con la directiva «Fue una relación que arrancó atada con alambre, pero yo no estoy acá para juzgar como se maneja una directiva o un club, mi trabajo es tratar de mejorar al futbolista. Lo ideal es que todos estén alineados, pero somos seres humanos y disentimos en un montón de situaciones, pero no soy de los que creen tener razón. Los entrenadores convivimos con los resultados y si no se dan tenés que irte a tu casa por más que te lleves bien con todos. Los resultados son los que mandan».