El entrenador tatengue ya comenzó a evaluar las alternativas con las que cuenta para intentar cerrar el pase a octavos de final en Belo Horizonte.
Unión se encuentra ante uno de los desafíos más importantes de su historia, ya que luego del 3-0 que le propinó al poderoso Atlético Mineiro en el 15 de Abril, buscará meterse en los octavos de final de la Copa Sudamericana.
El logro no solo sería trascendental por acceder por primera vez a una instancia decisiva de dicho torneo internacional, sino que también representaría uno de los triunfos más importantes debido a la envergadura del rival, que supo ser campeón de la Copa Libertadores de América y es uno de los equipos más importantes del vecino país.
Leonardo Madelón se lució en una semana con los planteos de los partidos ante el Galo y River, en la Sudamericana y la Superliga, respectivamente, ya que puso de rodillas al brasileño, mientras que al Millonario, líder del campeonato, le ganaba en Santa Fe pero no pudo sostener el resultado ante la gran calidad que tienen los dirigidos por Marcelo Gallardo.
Sin embargo, las dudas volvieron a surgir tras la derrota ante Patronato, ya que el equipo se mostró muy vulnerable, a pesar de jugar todo el segundo tiempo con 10 jugadores, lo que abre un gran interrogante de cara al duelo ante Mineiro, más allá que el mismo entrenador manifestó en conferencia de prensa que notó que su equipo pensó más en lo que ocurriría en Brasil que lo que estaba pasando en Paraná.
Encima en el primer tiempo, luego de haber tomado la decisión de colocar en cancha lo mejor que tenía a disposición, se tuvo que ir reemplazado Jalil Elías con un fuerte golpe en la cadera, producto del cual se le tuvo que hacer un estudio y en las próximas horas se sabrá con certezas si podrá o no estar presente en Belo Horizonte.
En cuanto a la formación inicial, se presume que Madelón tomará sus recaudos y que la misma se parecerá más a la que jugó ante River, que la que unos días antes había jugado la ida ante el Galo y que repitió contra Patronato, sin éxito en el Presbítero Bartolomé Grella.
Es que nuevamente podría parar al equipo con una línea de cinco defensores, donde se daría el ingreso de Federico Milo para cubrir el lateral izquierdo, con lo cual Brian Blasi seguiría por la derecha, y los tres centrales serían Jonathan Bottinelli, Franco Calderón y Claudio Corvalán.
En la mitad de la cancha, si no hay ningún imprevisto, el doble comando en la parte central lo seguirían tomando Elías y Javier Méndez, mientras que por derecha podría ingresar Ezequiel Bonifacio y por izquierda podría moverse el uruguayo Javier Cabrera, relegando de esta forma a Gabriel Carabajal al banco de los relevos.
Arriba, en tanto, tal cual ocurrió en el encuentro ante River, Walter Bou sería el único punta, esperando ser abastecido por Bonifacio y Cabrera, y realizando un gran desgaste físico, como es una de sus principales características, para obstaculizar la salida clara del conjunto brasileño, que tendrá la presión de intentar dar vuelta la serie.
Los 11 que podrían pisar el campo de juego Independencia para completar la obra, luego del 3-0 en Santa Fe, serían los siguientes: Sebastián Moyano; Brian Blasi, Jonathan Bottinelli, Franco Calderón, Claudio Corvalán y Federico Milo; Ezequiel Bonifacio, Javier Méndez, Jalil Elías y Javier Cabrera; y Walter Bou.
