Este jueves se agolparon en uno de los puntos de expendio que dispuso la dirigencia de Atlético Mineiro.
El 20 de febrero está entre ellos de una manera por demás de especial. El esfuerzo que la mayoría hizo tendrá su recompensa cuando a las 21.30 se inicie la revancha entre Atlético Mineiro y Unión.
Demás está decir las gestiones que llevaron adelante los directivos rojiblancos, aunque no encontraron eco en sus pares de Atlético Mineiro. Esto tiene que ver fundamentalmente con ampararse en el protocolo de entregar 2000 entradas a la parcialidad santafesina.
Por eso para muchos hinchas fue necesario adelantar el viaje, esperar en playas cercanas esta revancha, sin dejar de realizar el trámite en las bocas de expendio que destino el Galo para el club rojiblanco.
En los últimos días fue incesante, no solamente la llegada de parciales tatengues a Belo Horizonte, sino también que se fueron agolpando en los lugares donde se vendían las entradas.
Varios de ellos armaron una fiesta, con gorros, camisetas, banderas y muchos cánticos, mostrando la efervescencia ante un momento histórico y en las puertas de un partido especial que puede dejar al equipo de Madelón en la segunda fase de la Copa Sudamericana.