El volante de Colón, Marcelo Estigarribia, se refirió a cómo fue el pago del salario y, además, no sabe qué pasará el 30 junio cuando vence su contrato

Por ahora no hay certezas de cuándo volverá el fútbol en Argentina, ya que se presume que la cuarentena por la pandemia del coronavirus se extenderá. En consecuencia, el plantel de Colón sigue trabajando en sus casas para estar preparado en caso que sea necesario regresar a la rutina. Eso sí, siempre con la premisa de quedarse en casa. En un alto a sus actividades, Marcelo Estigarribia habló de cómo afronta esta situación atípica, además de dar detalles de cómo fue la charla respecto al salario.

«Acá vamos, bien, con la familia en Santa Fe. Por ahí no es lo normal, pero la llevamos bastante bien, compartiendo con mis nenas y demás. Nos estamos fortaleciendo como familia a la espera que esto termine rápido», explicó el paraguayo en diálogo con Sol 91.5.

Aunque dejó en claro que no está de licencia: «Estar de vacaciones es poder ver a tus padres, amigos y tener visitas y ahora lo que hay que hacer es cuidar a los tuyos. Hay una psicosis en la que se busca cuidar a todos y por eso solo pienso en quedarme en casa para el resguardo. Estoy pendiente de todo. Me interioricé aún más con las cosas de la casa. Algo que cuando entrenás y demás no pasa tanto».

Marcelo Estigarribia reveló como son sus días: «Estamos entrenando bastante duro en doble turno y por suerte vamos bastante bien. Tengo el espacio suficiente en casa. Nos mandan la rutina semanal y por suerte tengo lo necesario para los trabajos de fuerza. Se hace un poco monótono, porque uno está acostumbrado a hacer entrenamientos con el balón. A veces te termina desganando, pero trato de tomarlo y afrontarlo de la manera más responsable. Es dedicación, porque hay que estar preparados. Aunque el fútbol por ahora no es prioridad».

Seguidamente, Chelo se metió de lleno en la polémica que se instauró sobre el pago del salario: «Por cómo está el mundo, hay que ser autocríticos y ponernos en el lugar de todos. El plantel cobró el salario, en algunos, un 40% o 50%e. Todos debemos adecuarnos. Lo importante es la salud y después se verá cuándo vuelva el fútbol. El grupo siempre estuvo abierto a charlar, porque es cuestión de ver los pasos a seguir. Pero es importante la comunicación, porque sino sería complicado ponernos de acuerdo en el salario, por ejemplo. Prefiero en mi caso que sean honestos antes que me mientan».

En otro tramo de la entrevista, Marcelo Estigarribia dudó respecto a esta altura en qué posición se siente más cómodo: «Jugué de tres, de interior, volante por izquierda y doble cinco. Entonces con la experiencia te vas llevando. Siempre dije que donde el entrenador creo que puedo serle útil mostraré predisposición. En el puesto que sea. Me tocó en un momento de mi carrera ser extremo derecho y traté de cumplir. Puedo tener déficits y virtudes, pero nunca me va a faltar compromiso».

Ante la consulta respecto a cómo es su relación con los dirigentes, fue contundente: «Personalmente no tengo mucha relación con los dirigentes. Con el que más hablo es con Horacio (Darrás). Se comunicó conmigo la semana para explicar el tema del salario y le dije que entendía y aceptaba, esperando que sean más a menudo las conversaciones. Es con quien tengo más relación por estar en los entrenamientos. Con José Alonso hablé también, pero con José Vignatti dialogué dos o tres veces en estos tres años. No tengo una conversación fluida, pero si sé que Pulgar lo hace más. Capaz no hablamos tanto por mi manera de ser. Soy de hablar poco realmente. Debe ser por eso».

Una de las noticias en esta cuarentena fue el robo en el predio de Colón y donde Marcelo Estigarribia publico que pedía que le devuelvan sus botines por el valor emotivo que tenían. Sus expresiones fueron virales, pero los réditos no demasiados: «Creo que recuperé un par. Pero no sé más nada al respecto. Me escribieron ofreciéndome mis propios botines para que los compre y accedí, porque tenían un valor sentimental grande, tenían el nombre de mis nenas. Se recuperó uno nomás. De los otros no sé dónde terminaron».

En el final, puso un interrogante a su continuidad en Colón: «Mi contrato termina el 30 de junio. Veo el futuro en Colón como en todos los años. Esperando. Me siento identificado y querido con el club. Estamos muy cómodos con mi familia en Santa Fe y pese a todo, no pensé aún que pasar. Como que me acostumbré a esperar hasta el final» .