El delantero de Unión debe retornar al Tate ya que el 30 de junio vence su vínculo con Alvarado de Mar del Plata, donde firmó por seis meses
Nicolás Andereggen se convirtió en el jugador más joven en debutar con la camiseta de Unión en Primera División. Eso ocurrió el 7 de noviembre de 2015 en la derrota del Tate frente a Estudiantes de La Plata. Ese día Leonardo Madelón lo mandó a la cancha a los 25′ del segundo tiempo para reemplazar a Juan Rivas.
Con apenas 16 años (nació el 22 de septiembre de 1999) el delantero oriundo de San Jerónimo Norte, ingresaría en la historia del club por la estadística descrita anteriormente. Mucho se habló de sus condiciones y el hecho de hacerlo debutar con tan solo 16 años lo ratifican.
Sin embargo, no tuvo la continuidad deseada y eso hizo que en enero del 2019 deba emigrar al FC Zurich de Suiza en donde apenas jugó un partido y por eso pasó al equipo U21 que milita en la Promotion League en donde disputó ocho encuentros y anotó un tanto.
Pero a fines del 2019 retornó a Unión, aunque Madelón prefirió que tenga la posibilidad de jugar en otro equipo y por eso fue cedido a préstamo a Alvarado de Mar del Plata, por seis meses, club que dirige Juan Pablo Pumpido, quien conoce y muy bien a Andereggen. Aunque apenas disputó dos encuentros.
En consecuencia, el 30 de junio vence el contrato con el elenco marplatense y por ese motivo, el delantero deberá regresar a Unión esperando que ocurre con la llegada de un nuevo entrenador. Desde su debut en 2015 hasta 2018, Andereggen disputó 19 encuentros con la camiseta rojiblanca sin poder convertir.
En diálogo con Radio Gol 96.7 Andereggen se refirió a su situación personal, en donde repasó su etapa en el fútbol de Suiza y los motivos por los cuales decidió jugar en la Primera Nacional con la camiseta de Alvarado. Pero además contó las ganas que tiene de triunfar en el Tate.
«Estoy pasando la cuarentena en la casa de mi familia en San Jerónimo Norte, al menos tengo el patio para entrenar y poder moverme al aire libre. Una vez que sos profesional comenzás a cuidarte, te mantenés, las condiciones no son las mismas, pero uno busca la manera de ingeniárselas para estar de la mejor manera», comenzó diciendo en el inicio de la charla.
«La experiencia en Suiza fue muy positiva porque aprendí mucho. Por ahí me costó jugar y en lo deportivo fue un año duro, por ahí entrenaba mucho más de lo que jugaba. Pero a nivel personal me sirvió un montón, aprendí mucho. Conocí otro fútbol, otra cultura. otra forma de vivir. Es el fútbol europeo y eso te abre la cabeza»
Para luego referirse a las dificultades que tuvo en la adaptación «En Suiza lo del idioma es una barrera complicada, yo manejaba el inglés, pero en Suiza no se habla mucho inglés, se manejan con el idioma alemán y eso me jugó una mala pasada. Aparte son muy cerrados y si no podés adaptarte es muy difícil. El club me puso a tomar clases para aprender el idioma, eso me ayudó, pero es difícil cuando no conocés el idioma, hacés el esfuerzo, pero es una barrera», explicó.
Respecto a la posición en la que se desempeñó dijo: «Jugué un solo partido en el primer equipo del Zurich, entré de delantero 10 minutos en el partido ante el Bassel que perdimos 2-0. Y en el segundo equipo también me desempeñé como delantero, cuando jugábamos 4-3-3- lo hacía como extremo, ya sea por derecha o por izquierda».
De la chance que se le presentó de jugar en Alvarado expresó: «Siempre la idea fue tratar de triunfar en Unión, de demostrar mis condiciones, pero no se dio la chance y tenía que buscar la manera de jugar. No podía quedarme seis meses si jugar y ahí me llamó Juampi Pumpido para ir a Alvarado. Ahí estaban Algozino, Bracamonte, Zurbriggen, un muy lindo lindo grupo. Lástima que no pudimos jugar mucho. El 30 de junio se vence mi contrato y habrá que ver que pasa con mi futuro».