El presidente y reconocido entrenador de vóley, el profesor Carlos Hauque, sostuvo que fueron «dos años de mucho crecimiento».
Un ambicioso proyecto comenzó a gestarse hace dos años. Un grupo de profesores especializados pusieron en marcha Santo Tomé Vóley. El objetivo fue expandir una actividad sin mucho desarrollo en la vecina ciudad.Pero eso no fue impedimento para que Carlos Hauque, Cristian Jacob y Mariano Cinaglia, pongan manos a la obra un idea que ha tenido muy buena acogida en la comunidad santotomecina.
«Santo Tomé Vóley es un sueño hecho realidad. Cuando uno se inicia en la docencia o en la conducción de equipos, uno sueña poder cristalizar su modo de entrenar, su modo de ver el deporte, en un club que pueda tener el cien por cien de las directivas y normativas apuntando a lo que uno quiere.
En lo profesional también es todo un desafío porque nadie te prepara cuando salís del título de profesor, y es algo que se aprende día a día, ayudado por varios padres que han integrado la comisión. Es un enorme desafío que te hace crecer dentro y fuera de la cancha» le dijo el profesor Carlos Hauque.
El presidente y entrenador de Santo Tomé Vóley remarcó que «esta idea surgió en verano de 2017 con algunas charlas, con la meta de estar tanto Cristian como yo, de estar metidos en el vóley nacional, tuvimos la oportunidad de dirigir a nivel internacional, y no teníamos acá en nuestra ciudad. Siempre en las conversaciones Santo Tomé no tiene un club de vóley que apunte a lo federado».
Ante la consulta como ha sido este período desde el surgimiento, Hauque contó que «Estos dos años han sido sinceramente de mucho crecimiento a nivel humano y grupal. Hemos tenido muchas emociones humanas, si bien la parte deportiva se observa un crecimiento de las chicas que llegan sin saber jugar, y día a día van dominando las técnicas, te llena de placer. Pero la parte humana se da en el vínculo que se ha generado entre las chicas, en su equipo y en la interrelación con los demás, que nos da mucho placer, nos da mucha alegría y mucha fuerza para poder continuar».
«La idea fue masificar el deporte, que la mayor parte de la gente practique vóley, eso fue en 2018. El año pasado incursionamos en la parte federada, que asociamos la categoría sub 13 para empezar a competir en la tira oficial de la ASV. Básicamente nuestro objetivo es tener el cien por cien de los jugadores y categorías federadas, desde los más chicos hasta las más grande, pero es toda una continuación de trabajo que de acá a diez años lo podremos lograr» relató Hauque.
Santo Tomé Vóley ha crecido, pero Hauque no se olvida de los inicios al señalar que «son dos años fuera de la cancha bastante duro, bastante difícil, por el hecho que había muchas aristas y detalles que no los teníamos. Fueron piedritas, choque que tuvimos, y que por suerte pudimos ir solucionando. Al principio hubo algunas trabas pero después vino el apoyo de la Municipalidad, pero más que nada el de más de 150 jugadoras y jugadores que nos fueron empujando a solucionar los inconvenientes que se nos presentaron».
«Tuvimos complicaciones en el sentido de la infraestructura, en el sentido de normas de ruidos molestos, donde había que hablar con los vecinos y ambientar el gimnasio con un costo bastante elevado para no generar justamente esos ruidos que molestan ya que estamos en una zona céntrica. De a poco le pudimos ir mostrando a esta gente que lo nuestro era apostar a la salud, al deporte, y hoy estamos en una convivencia muy buena» expresó el profesor Hauque.
«La cuarentena nos llegó en un momento especial ya que en febrero arrancamos la pretemporada, en donde todas las chicas y chicos mayores de 11 a 14 años, porque este año ibamos a federar Sub 14, Sub 13 y Sub 12, en la ASV. Estábamos viento en popa con las pretemporadas, para jugar todas las ligas de la mejor manera posible» señaló el reconocido técnico internacional.
Hauque manifestó que «en marzo arrancamos con el minivóley, que es algo espectacular, ya que el año pasado empezamos de tener diez y pasamos a ochenta jugadoras, que no nos entraban en la cancha, tuvimos que duplicar horarios, para poder atenderlos a todos. Este año nos habiamos preparado mejor para atender cien chiquitos, pero esto de la cuarentena nos truncó este envión que teníamos».
«Esta situación la estamos pasando bastante bien, tenemos el ochenta por ciento de las jugadoras y jugadores que nos están pagando la cuota, que nos permite pagar el alquiler del gimnasio, junto a todos los gastos que tenemos fijos que no son pocos. Sinceramente se nos iba a complicar sino recibíamos este apoyo gubernamental» expresó el entrenador de vasta experiencia nacional e internacional, .
«Con todos los jugadores fuimos pasando propuestas de trabajos tanto físicos como técnicos, pensando más que nada en diversificar que hay chicos que viven en departamentos, algunos que tienen espacios, y otros que no tenían elementos. Siempre pasamos videos uno o dos por semana, con trabajos físicos, hechos por profesores especialistas en hacer estas rutinas. Hacemos trabajos preventivos, de bajo impacto, para que ocupen el tiempo en su casa, y para que no se olviden la parte técnica».