El plantel argentino realizará un viaje relámpago desde Barcelona a Roma para reunirse el domingo, luego de la tradicional misa en la Plaza San Pedro, con la máxima autoridad de la Iglesia Católica.
Luego de analizar como posibles fechas el miércoles 30 y el jueves 31 de mayo para la audiencia papal con la selección argentina, las agendas coincidieron en fijar el encuentro para el domingo 3 de junio, luego de la habitual misa en la Plaza San Pedro.
El Santo Padre había encendido la alerta sobre esta visita hace una semana en declaraciones espontáneas en el programa de Canal 13 al expresar: “Se van a reunir conmigo, van a pasar por acá (por los jugadores de la selección)”.
Si bien primero se pensó en viajar directamente a Roma desde Buenos Aires luego del amistoso previsto para el 29 de mayo ante Haití en la Bombonera, y luego se analizó desembarcar en la ciudad condal y luego viajar al Vaticano al día siguiente, estas dos opciones quedaron descartadas.
La voluntad de Francisco sorprendió a los dirigentes de la AFA que no esperaban esta parada pero este pedido llegó al corazón del presidente Claudio ‘Chiqui’ Tapia, ferviente creyente que fue el principal impulsor para concretar esta audiencia.
La idea inicial es realizar un viaje relámpago de unas horas desde Barcelona para no alterar el diagrama establecido por Jorge Sampaoli para los días de trabajo en la capital catalana previo al viaje a Israel para disputar el último amistoso antes del desembarco en Moscú para esperar el debut mundialista ante Islandia.