El tandilense, campeón el domingo último en Estocolmo, enfrentará al holandés Robin Haase por la ronda inicial del ATP de Basilea, que repartirá premios por 1.700.000 euros y en el que también debutará otro tenista argentino, Guido Pella, mientras que el azuleño Federico Delbonis ya está en octavos de final.
Del Potro, ubicado en el puesto 42 del ranking mundial de la ATP, conquistó el domingo último en Estcolomo el 19no. título de su carrera y con el ánimo por las nubes debutará ante Haase (64), un rival al que superó la última vez que se enfrentaron, en la ronda inicial de Wimbledon 2012.
En caso de ganar, Del Potro jugará en octavos de final con el chipriota Marcos Baghdatis (36) o el belga David Goffin (11).
El argentino está acompañado en la gira indoor sobre superficies rápidas por Daniel Orsanic, el capitán del equipo de Copa Davis de la Argentina, que el 25, 26 y 27 de noviembre jugará la final del Grupo Mundial 2016 ante Croacia, en Zagreb.
Por su parte, el bahiense Pella (59), también integrante del equipo de Copa Davis, debutará frente al francés Richard Gasquet (16), quien viene de ganar el domingo último el ATP de Amberes tras haber superado en la final al argentino Diego Schwartzman (54).
En el caso de superar al francés, Pella jugará en octavos de final ante el alemán Mischa Zverev (72) o el estadounidense Taylor Fritz (73).
Delbonis (48), por su parte, le ganó ayer en la ronda inicial al ruso Andrey Kuznetsov (47) por 6-4 y 6-4 y jugará su próximo partido frente al lituano Ricardas Berankis (91) o el canadiense Milos Raonic (4), segundo favorito al título del certamen.
El abierto de Basilea tuvo en su historia a cuatro argentinos fueron campeones: Guillermo Vilas en 1978, David Nalbandian en 2002, Guillermo Coria en 2003 y Del Potro en 2012 y 2013.
El gran ausente de la actual edición es el suizo Roger Federer, nacido en la ciudad y campeón en siete ocasiones: 2006, 2007, 2008, 2010, 2011, 2014 y 2015.
El notable tenista suizo le puso fin a su temporada tenística luego de haber perdido en las semifinales de Wimbledon, debido a sendas lesiones en la rodilla y la espalda.