Luego de lo que significó la inesperada clasificación de Chaco For Ever a los cuartos de final, cuando dejó en el camino a Villa Mitre, Rosario Central y Sarmiento de Junín, en la tierra bodeguera el principal candidato a quedarse con el boleto a la siguiente instancia era La T, ya que su gran producción en la Liga Profesional y la eliminación a River Plate hacian ilusionar a los tallarines con el título. Sin embargo, el que golpeó primero fue el Sabalero.
Antes de la finalización de la primera etapa, Damián Batallini improvisó una gran asistencia en profundidad para la proyección de Tomás Galván, y el volante resolvió con sutileza ante la salida de Guido Herrera. Una conquista que alimentó la esperanza del combinado liderado por Néstor Gorosito.
En el descanso Javier Gandolfi hizo reaccionar a sus dirigidos. Y si bien los de Pipo pudieron ampliar la ventaja con un mano a mano que desperdició Favio Álvarez y convirtió a Herrera en salvador, Valentin Depietri desarticuló a la última línea rival para abastecer a Ramón Sosa. Y el paraguayo no falló ante el achique de Ignacio Chicco: 1 a 1.
La inyección anímica que generó el empate parcial en los hombres de Talleres fue clave para capitalizar el desconcierto generalizado de Colón. Por lo tanto, cuando Gastón Benavidez se llevó por delante a toda la defensa del Sabalero a los 15 minutos del complemento, los de Santa Fe solo atinaron a ir a buscar la pelota al fondo de la red.
Con el temor a la posible eliminación, Gorosito envió a la cancha a todo su arsenal que tenía guardado en el banco de suplentes para afrontar el desafío de luchar por la permanencia en la Copa de la Liga. Con Ramón Ábila y Javier Toledo en reemplazo de Jorge Benítez y Tomás Galván, el Sabalero tuvo mayor peso en ofensiva.
A través de un lateral, como último recurso y el lema del lunfardo “a la carga Barracas”, Wanchope resistió las marcas para que el experimentado delantero con pasado en San Martín de San Juan y Sarmiento de Junín, entre otros equipos, establezca la igualdad. Sin dudas, en la tarde de Mendoza se vivió una jornada no apta para cardíacos. Y la clasificación debió resolverse desde los doce pasos.
En los penales el suspenso se mantuvo hasta las últimas consecuencias debido a las extraordinarias atajadas de los arqueros, aunque también hubo ejecuciones que no llegaron a destino por rebotar contra el poste o ir directamente afuera. Sequeira y Sosa no pudieron convertir para Talleres, mientras que Toledo, Espínola y Nardelli fallaron para Colón.
De los 9 disparos que se observaron en el Malvinas Argentinas, sólo pudieron marcar Bustos, Benavídez, Catalán y Meza. El 3 a 1 final en la serie depositó a La T entre los mejores ocho del torneo y ahora esperará por el vencedor del cruce que animarán Boca Juniors y Almagro. El combinado cordobés quiere volver a dar el golpe, como lo hizo con el Millonario y Chacarita. La demanda del fernet para los festejos dependerá de un nuevo triunfo.