El santafesino se transformó en la segunda incorporación de cara a los nuevos desafíos deportivos. El club le comprará parte de su ficha y le realizará un contrato por tres años y medio.

Se vivieron horas decisivas en la llegada de Brian Fernández a Colón, en una novela que tuvo muchísimos capítulos y que finalmente tuvo un final feliz.

Es que el santafesino una vez que se abrió el mercado de pases hizo público, en su cuenta de Instagram, su deseo de convertirse en refuerzo sabalero, luego que la MLS de Estados Unidos le rescindió su contrato, siendo jugador de Portland, tras violar el protocolo en contra de las adicciones a las drogas

En varias ocasiones el jugador estuvo cerca de convertirse en refuerzo rojinegro, ya que es un viejo anhelo del presidente José Vignatti, quien en las anteriores ocasiones no contó con el visto bueno del entrenador Eduardo Domínguez.

En tanto que en otras oportunidades el santafesino fue transferido en dos importantes operaciones, la primera a Necaxa de México y la siguiente al conjunto estadounidense, el cual desembolsó cerca de 11.000.000 de euros por su ficha.

Durante la negociación surgieron todo tipo de rumores, como que Cristian Bragarnik, su representante, exigió una importante suma en compensación para el conjunto estadounidense tras la rescisión de su vínculo.

También se habló de la chance que en la operación puedan ingresar parte de los pases de Braian Galván y Brian Farioli, aunque esta posibilidad quedó desechada, al igual que las posibilidades que Nicolás Leguizamón y Tomás Sandoval lleguen a Unión La Calera de Chile como parte de la negociación.

El jugador, por su parte, no se cansó de hacerle guiños a la dirigencia y a los hinchas de Colón en su Instagram e incluso subió una foto trucada donde se lo podía observar firmando su contrato con Colón.

Lo concreto es que el jugador en Buenos Aires sorteó la revisión médica y llegó la documentación de la MLS donde se declara al jugador en libertad de acción, con lo cual los derechos federativos pasarán a Colón.

En cuanto a los términos de la operación, en un primer momento trascendió que el jugador firmaría un vínculo por seis meses o que incluso tendría la relación por un año, con la posibilidad de rescindirlo en junio.

Es que los dirigentes de Colón, en las negociaciones que mantuvieron con Bragarnik, acordaron la compra de su pase (o un porcentaje del mismo), y se le realizará un contrato de tres años y medio.

Mientras tanto, Fernández esperó en Buenos Aires que llegara esta documentación desde Estados Unidos, con lo cual en las próximas horas se trasladará a Santa Fe para comenzar a trabajar con el plantel de Colón, a las órdenes de Diego Osella.