El ahora ex entrenador leproso hizo durísimas declaraciones contra el presidente leproso, al que responsabilizó directamente por su salida de la institución
Diego Osella dejó de ser el técnico de Newell’s tras la caída ante Unión. Pero según él mismo explicó, ya tenía tomada la decisión pasara lo que pasara en Santa Fe. El motivo: las declaraciones de Eduardo Bermúdez del viernes, que según el ex DT «menospreciaron» su persona y desviaron la atención del verdadero problema que afecta a la entidad.
«Me voy a ir, pero le voy a decir lo que siento cara a cara. No nos merecemos que salga a mandar mensajes», dijo en conferencia de prensa.
«Es la segunda vez que dice que me dedique a entrenar y nada más. Estuvieron 40 minutos hablando y me dejan mal parado delante de la gente en general. Las palabras de Eduardo desviaron el real problema que tiene la institución, se volcó con un menosprecio hacia mi persona, menospreciando los clubes que dirigí y callándome la boca», tiró.
Según Osella, «yo no critiqué a nadie, ni a la comisión ni a nadie. Voy a hablar con Eduardo, con los futbolistas, hay cosas que no se pueden volver atrás. Le agradezco el apoyo que me dio en el cargo, se lo devolvimos con una campaña en la que Newell’s sumó mucho, pero esto generó un desgaste muy grande que no se puede disimular».
Y se mostró indignado con la frase de que él era un padre loco y Osella su hijo rebelde: «Mi papá falleció en 2014 y lo extraño todos los días. Hay cosas que no se dicen. Hay una línea que cuando se cruza, no se puede volver atrás Ganara o perdiera, el mensaje iba a ser el mismo», cerró.