Chase Carey es el nuevo jefe de la Fórmula 1 y deberá lograr mantener el negocio de forma exitosa como su antecesor, Bernie Ecclestone. Conocé la historia del neoyorquino.
Liberty Media es una de las empresas más importantes de Estados Unidos en comunicación y con la compra de la Fórmula 1, su presidente y Ceo, Chase Carey, será el nuevo mandatario de la máxima. Sin embargo, Bernie Ecclestone seguirá como presidente de honor.
Carey nació en 1954 y a sus 62 años tendrá un duro trabajo por delante: reemplazar a Ecclestone. Luego de estudiar en la Colgate University y la Harvard Business School, en 1988 comenzó a trabajar en “News Corp” donde ascendió hasta llegar a ser director general de la Fox Broadcasting y director general de Operaciones.
En 2003 fue designado director ejecutivo de Direct TV donde multiplicó sus suscriptores. En 2006, News Corp vendió su participación de control en Direct TV a Liberty Media, a cambio de acciones y en 2009 regresó a News Corp para ser Presidente y Director de Operaciones.
A fines del año pasado Liberty Media compró acciones de la Fórmula 1 y Chase Carey fue designado presidente. Ahora, con la gran parte de las acciones de la máxima en manos de la empresa estadounidense también lo nombraron CEO de la categoría.
Su primer objetivo será hacer los eventos deportivos mayores y mejores, esto quiere decir que buscará darle más importancia a la interacción de los espectadores y seguidores de las carreras de Fórmula 1. Su primera iniciativa, por el momento, será mudar la sede de la F1 a un nuevo edificio ya que “esta no es la adecuada”, dijo.
Los que lo conocen, saben que el neoyorquino nunca estuvo ligado a la máxima pero si le gusta el automovilismo aunque sus deportes favoritos son el rugby y el béisbol (es hincha de los Yanquis de Nueva York).
Un detalle particular de Carey es su bigote que no lo lleva por motivos estéticos sino que para tapar una cicatriz que lleva después de un fuerte accidente automovilístico.