Chapecoense empató 2.2 un amistoso con Palmeiras, en el primer partido después del accidente aéreo de noviembre pasado, con la presencia de los tres jugadores sobrevivientes de la tragedia,
el arquero Jackson Follman, en silla de ruedas, y los defensores Hélio Neto y Alan Ruschel, quienes levantaron al público presente la Copa Sudamericana..
Los goles del encuentro los marcaron el defensor Douglas Grolli y el mediocampista Amaral, para el equipo local; mientras que los volantes Raphael Veiga y Vitinho anotaron para el club paulista, actual campeón del fútbol brasileño
Al grito de «¡Vamos, Vamos, Chape!», los simpatizantes del club de Santa Catarina se hicieron presentes, vestidos de verde y blanco, en el estadio Arena Condá, donde se había enfrentado, casualmente, también con Palmeiras, en el último partido oficial antes del accidente aéreo de Colombia.
Chapecoense, actual campeón de la Copa Sudamericana, volvió a disputar un partido, esta vez un amistoso, después del luctuoso accidente del 28 de noviembre último, que dejó 71 muertos, entre los cuales casi todo el plantel, cuando se disponía a jugar la final del torneo subcontinental ante Atlético Nacional de Medellín.
«Chape», ahora dirigido por Vagner Mancini, formó en esta ocasión con Artur Moraes; Joao Pedro, Fabricio Bruno, Douglas Grolli y Reinaldo; Andrei Girotto y Amaral; Nenén; Rossi, Niltinho y Welington Paulista.
En la segunda parte ingresó el delantero argentino Alejandro Martinuccio (ex Nueva Chicago), quien ya está recuperado de una molestia en la rodilla.
Con el objetivo de reconstruir el plantel, los dirigentes renovaron el equipo con 23 jugadores que promedian los 24 años, fruto de incorporaciones y el ascenso de 11 futbolistas de las divisiones inferiores del club.
Sin importar el resultado, el encuentro le sirvió a la ciudad de Chapecó para volver a disfrutar de un partido de fútbol, luego de los momentos dramáticos que se vivieron, con el entierro de los jugadores, que fueron velados en el estadio mismo.