José Vignatti manifestó que la semana que arranca será clave en la contratación de los refuerzos, y Eduardo Domínguez estaría muy cerca de tener al delantero que espera para darle un salto de calidad al ataque de su equipo.
Cuando arrancó la pretemporada Eduardo Domínguez dijo que la prioridad era sumar un marcador central y volantes mixtos, ya que en ese momento el presidente José Vignatti había cerrado la contratación del uruguayo Leonardo Burián, quien llegó para reemplazar al ecuatoriano Alexander Domínguez en el arco.
Pero a medida que fue avanzando la puesta a punto comenzó a analizar con mucho más criterio la posibilidad de sumar un jugador en el ataque. De decir que «no era la prioridad» sumar jugadores en ese puesto pasó a tenerlo como una de la grandes alternativas que buscarían en el mercado de pases.
Es que el equipo solamente juega con un delantero que es Javier Correa, mientras que como acompañante se encuentra Alan Ruiz que está más para crear juego que para definirlo. En tanto que Diego Vera es muy probable que emigre a Tigre en la operación por la cual desembarcaría el marcador central Erik Godoy.
Uno de los primeros nombres que sonaron para reforzar el ataque fue el de Ezequiel Rescaldani, exgoleador de Vélez y Atlético Nacional de Colombia que actualmente se encuentra jugando en el Huesca de la Segunda División de España. Pero cuando fue consultado Domínguez manifestó que no estaba en consideración ya que pretendía a un atacante de otras características.
Es que más allá de Correa en el plantel se encuentran Tomás Sandoval, Nicolás Leguizamón y Tomás Chancalay, quienes se recuperan de distintas lesiones. El más distinto a todos es el entrerriano, aunque el DT nunca dejó de desconocer que es juvenil al que hay que llevar de a poco.
En una improvisada conferencia de prensa que brindó el presidente sabalero tras la clasificación en Copa Argentina en cancha de Newell’s, destacó: «Es muy posible que la semana que viene incorporemos a varios refuerzos. No puedo decir en qué posiciones».
Y el que estaría muy cercad de cruzar el Charco para calzarse la rojinegra es el uruguayo Gonzalo Bueno. El atacante de 25 años viene de desempeñarse en Nacional de Montevideo, uno de los grandes de su país. La operación podría cerrarse a préstamo por un año.
Gonzalo Diego Bueno Bingola nació el 16 de enero de 1993 en Montevideo y es hijo de Gustavo Bueno, «El Zorro», quien se desempeña como entrenador.
El joven atacante debutó con 18 años en Primera División, en la derrota de Nacional ante Rampla Juniors. Su primer tanto lo consiguió con la camiseta del Bolso el 18 de septiembre de 2011, en la victoria frente a Cerro Largo por 4-0.
Sus grandes actuaciones en Nacional despertaron el interés del Bologna de Italia, quien realizó una importante oferta por sumarlo. Pero en 2013 el club ruso Kuban Krasnodar lo adquirió en 4.500.000 de dólares, con un contrato por cinco temporadas.
Luego de sufrir una grave lesión, en enero de 2015 volvió a préstamo a Nacional para jugar la Copa Libertadores de América. Posteriormente pasó por Estudiantes de La Plata, y Defensor Sporting. En el elenco charrúa tuvo un gran semestre, donde fue el goleador y máximo asistente, para lograr el Torneo Apertura 2017. En la segunda mitad del año pasado regresó a Nacional, donde conquistó el Torneo Intermedio 2017 y 2018.
Además, Bueno tuvo un paso por la Selección Sub 20 de Uruguay, que logró el subcampeonato en el Mundial de Turquía. Jugó cinco encuentros, anotó un gol y entregó una asistencia. Además, disputó el Sudamericano Sub 20 de 2013 en nuestro país, donde la Celeste logró el tercer puesto y él convirtió un tanto.
En total en su carrera jugó 107 encuentros y consiguió 24 goles. También repartió 20 asistencias. A nivel internacional disputó 15 cotejos, donde consiguió seis goles.
Otra uruguayo que interesa es Nicolas Prieto, volante de 25 años. Surgido en Nacional de Montevideo, de última temporada en Danubio.