El nuevo entrenador habló a corazón abierto en su presentación oficial y dio detalles del plan que tiene para este 2020. Además, habló del plan a llevar adelante y de los posibles refuerzos
Diego Osella apuntó a formar a un Colón que vaya al frente y sea sólido.
Colón puso en marcha este viernes por la tarde su nueva ilusión en la Superliga de mano de Diego Osella, quien encara su segundo ciclo. Una comunión que quedó muy arraigado por lo realizado en la campaña de 2014 y, sabiendo que la permanencia apremia, se volvía a confiar en él, que sume este desafío con sensaciones muy diferentes y con total optimismo.
Si bien es cierto que ya había hablando con los medios de Santa Fe al confirmarse su contratación, todavía no se lo había presentado formalmente, algo que se dio tras terminada la primera práctica en el predio Ciudad Fútbol. El encargado de abrir la conferencia fue el vicepresidente Horacio Darrás, secundado por José Alonso y el secretario deportivo, Francisco Ferraro.
Después, el flamante conductor tomó la palabra: «A muchos los conozco de cuando estuve con Mario Sciacqua, después de dirigirlo con Roberto Sensini y estando a la cabeza en 2014. Tengo una alegría muy grande de estar en un club que quiero mucho. Me dio la oportunidad de trabajar en primera división y eso nos permitió crear un vínculo que perduró en el tiempo. Este plantel llegó a la final de la Sudamericana en un gran mérito que comprende también a los dirigente, el anterior cuerpo técnico y la gente. Ahí está el secreto de este club, la pasión y el amor que se tiene por estos colores. Tengo mucha satisfacción de estar al frente de esta institución tan prestigiosa».
Ya en el ida y vuelta con los medios, plantó bandera sobre algunas variantes en su manera de ser: «Ganamos en madurez y trato de nunca perder mi esencia. Es imposible que quiera mostrar otra cosa, porque no me sale. Trato de ser auténtico. Tengo ahora un mayor recorrido y el objetivo es mejorar. En 2014 había una incertidumbre muy grande por el éxodo de jugadores y la económica del club, algo que hoy es muy diferente. Está claro que a este plantel hay que motivarlo y darle herramientas para impulsarlo. Ojalá podamos generar una identificación con la gente como en aquel año. Hay un gran plantel y debemos confiar muchos en ellos».
«A lo largo de nuestro recorrido fuimos cambiando dependiendo el equipo. El Colón de 2014 era un equipo práctico. En Olimpo fuimos más verticales, al igual que en Newell’s. Nos fuimos adaptando a los planteles. Hay que ser inteligentes en pos de encontrar el mejor funcionamiento. Soy una persona con más paciencia y no tan eufórica. No me veo saltando como un canguro como en 2014, je, pero tampoco es que pierdo mi forma de ser. Quizás soy más pensante, pero mantengo la misma pasión para los entrenamientos», agregó.
Respecto a las probables incorporaciones, como Brian Fernández, dijo: «La comisión directiva están haciendo un gran esfuerzo. Hablar de nombres en medio de las tratativas es engorroso y podría complicar las cosas. Estoy muy tranquilo con las gestiones que se están haciendo y descanso en ellos, los dirigentes. Vamos incorporando nombres en base a lo necesario que creemos para darle un toque distinto al plantel. Yo solo puedo pasar los nombres y entusiasmar al futbolista, después con lo complejo que está la economía no depende de mi. Son nombres que estamos manejando, pero falta».
Volviendo a lo que significa esta nueva chance en Santa Fe, mencionó: «Siempre donde uno lo pasó bien tiene la ilusión de volver. Era cuestión de esperar. Las cosas se tienen que dar de manera natural. Me encontré con un plantel predispuesto y con ganas de trabajar. Hablamos poco y solo nos enfocamos en laburar. La idea es que nos vayan conociendo y el piso que tenemos de entrada es muy bueno. Ya nos fijamos en el partido en Santiago del Estero. Queremos un Colón que vaya al frente y sea sólido».
«No vamos a traer por traer. Hay un plantel importante, con jóvenes con proyección y muchas ganas sobre todo. No me puedo parar en un número de profesionales, pero amontonar gente y que no sean soluciones no es la idea», concluyó.