El presidente de Colón, José Vignatti, no ocultó su emoción por el primer título de la historia para el club que preside. «No es fácil aguantar 116 años», tiró
Vignatti.
José Néstor Vignatti escribió en San Juan otra página para situarse como el presidente más exitoso en los 116 años de vida que tiene Colón.
En este proceso debió olvidar ese trago amargo de no poder ser campeón en la Copa Sudamericana y cuando el equipo estaba al borde del descenso, antes de la pandemia, fue a convencer a Eduardo Domínguez para que retorne al barrio Centenario.
«La verdad que esto es la culminación de un trabajo que se viene haciendo desde hace mucho tiempo, el club no estaba en las mejores condiciones y en estos años por suerte conseguimos que Colón ocupe el lugar que se merece, futbolísticamente fue un partido muy lindo», apuntó de movida.
Y luego, agregó: «Ante todo el mensaje a toda la gente que está festejando en Santa Fe en momentos difíciles le pedimos respeto y mucha efervescencia dentro de los límites que se puede».
Vignatti recordó que «este triunfo le permite a Colón participar nuevamente en Copas internaciones, vamos a ir por ese camino, Santa Fe tiene un potencial muy grande con Colón».
El titular rojinegro no dudó en admitir que «después de la final de Paraguay entramos en un bache que nos llevó a lugares que no queríamos ni merecíamos. Nos dio fuerzas eso para salir adelante y la llegada de Eduardo Domínguez fue fundamental».
En medio de tanto jolgorio, el presidente de Colón dijo que «este es el momento del festejo y en los próximos días nos vamos a sentar y expresar con Domínguez lo que quiere cada uno, esperemos llegar a buen puerto».
Antes de retirarse, Vignatti añadió que «esto es para el hincha y el socio de Colón se merecen todo esto, no es fácil aguantar 116 años sin títulos, era hora que llegara y llehó de la mejor manera».