Los Gadliadores cayeron por un apretado 25 a 23 y se quedaron sin chances de pasar a la rueda siguiente, cuando aún resta un partido de la zona. Fue el primer duelo olímpico de este deporte entre los rivales sudamericanos.
El seleccionado argentino de handball, Los Gladiadores, quedó eliminado al cabo de su cuarta presentación en el Grupo A de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, al caer por un apretado 25 a 23 en el clásico sudamericano frente a Brasil, en el primer cruce entre ambos en la historia de esta competencia.
Si el partido se definiera por tríos de jugadores efectivos habría que decir que el capitán Gonzalo Carou y los hermanos Pablo y Sebastián Simonet no tuvieron opciones ante la contundencia de los armadores brasileños Joao Silva y Gustavo Rodríguez, y las atajadas del prácticamente infranqueable Leonardo Ferrugem en el primer período.
Y pruebas al canto, el arquero brasileño tuvo siete contenciones magistrales en ese primer tiempo, obturando un par de mano a mano en sendos contraataques argentinos con posicionamientos favorables para los jugadores argentinos.
Mientras que en esos primeros 30 minutos que Brasil terminó ganando por 14 a 7, por ejemplo Joao Silva manifestó de arranque una contundencia fenomenal al disparar cinco veces al arco argentino y anotar en cada uno de sus tiros.
El que tuvo poca participación en el equipo argentino, luego de llegar a este encuentro con alguna molestia muscular, fue el tercero de los hermanos Simonet, Diego, y su ausencia también la sintió el conjunto albiceleste, lo mismo que la de Federico Fernández.
Y a partir de allí, con Argentina arriesgando todo en pos de descontar, jugando sin arquero, los brasileños empezaron a convertir de continuo ante un equipo albiceleste descontrolado al que solamente lo asistía el amor propio.
Pero promediando esa etapa final y luego que los brasileños alcanzaran una diferencia máxima de 12 puntos, algo inesperado teniendo en cuenta la paridad que existe entre ambos conjuntos, y sobre todo con los condimentos que tiene un clásico, en un arresto de esa vergüenza deportiva mencionada, el conjunto argentino «secó» el ataque de Brasil y le metió un parcial de 10-0 para quedar a dos tantos (23-21) con seis minutos en el reloj.
Convirtieron los brasileños a través de Gustavo Rodríguez y Ramiro Martínez volvió a achicar la diferencia a dos puntos cuando entraron en los últimos 35 segundos de partido, pero otra vez los «verdeamarillos» anotaron y el nuevo descuento de penal a 10 segundos del epílogo ya no alcanzó para nada.
Claro que la eliminación argentina, cuando aun resta una fecha para cerrarse el grupo, no está ligada pura y exclusivamente a su actuación de esta mañana de viernes en Tokio, sino a que el equipo dirigido por el español Manolo Cadenas también perdió los tres partidos anteriores.
Es que el seleccionado argentino cayó en el debut con Francia por 33-27, mientras que en su segunda presentación perdió por un marcador parecido de 33-25 ante Alemania, y en su tercer juego la derrota fue más apretada frente a Noruega, que lo derrotó por 27 a 23.
Lo que le queda por delante a Los Gladiadores para cerrar su participación en esta fase de grupos es el último enfrentamiento ante España, el próximo domingo 1 de agosto desde las 2.15 (hora argentina). Para los brasileños, en tanto, estará por delante jugarse la clasificación frente a Alemania en esa última jornada.