La expectativa es tan grande para el partido histórico del 9 de noviembre en Asunción que la gente agotó el cupo correspondiente para el Sabalero. De igual modo, quedan algunas neutrales

Pese a que perdió el Clásico, que el miércoles juega por los cuartos de final de la Copa Argentina y que en la Superliga debe sumar para escaparle al descenso, en Colón solo se habla de la histórica final de la Copa Sudamericana del próximo 9 de noviembre en la Nueva Olla de Asunción.

Por más que se diga que lo importante es lo que viene, la realidad lo supera y el cotejo ante Independiente del Valle es lo que se lleva toda la atención. Ni hablar en los hinchas, que ya planifican lo necesario para estar en dicho escenario para vivir un momento único.

Tanto es así como en las últimas horas se conoció la información que ya no habría más localidades de las dispuestas para el club. Vale recordar que a cada equipo le corresponden 10.000 y los fanáticos sabaleros hicieron volar los tickets en cuestión de horas. Después ante el pobre expendio de los ecuatorianos se hizo una gestión para habilitar un número mayor y todo llegó a buen puerto y la organización lo comunicó a través de las redes sociales.

Pero la realidad es que también arrasaron con esas prometiendo un marco superior a las 20.000 almas en un estadio con capacidad para 45.000. Esto fue un fuerte cimbronazo para aquellos que todavía no habían podido adquirir su lugar. Ni hablar ante lo masivo que fue todo ocasionando que las diferentes plataformas de ventas colapsen.

De todas maneras, hay que esperar y no ser contundentes en este sentido, ya que la dirigencia está actualmente en la sede de la Conmebol en Luque viendo la posibilidad de conseguir un remanente. Vale recordar que todavía se pueden comprar las neutrales y preferenciales, pero su acceso y costo son más onerosos.

A esta altura, algunos ya ni se fijan en el precio, pero lo complejo es lograr ingresar los datos, ya que las web oficiales (https://www.eventim.com.br/campaign/sudamericana-es/ como uno de los ejemplos se caen permanentemente).

Un escenario que tiene en vilo a los que tienen su lugar seguro y a aquellos que hacen hasta lo imposible para asistir. Se trabaja para que haya más lugares y por eso serán claves las próximas horas.