Un grupo de presidentes de clubes de primera división se reunió en la AFA para poner otra vez sobre la mesa la fundación de la Súperliga, aunque del encuentro no participaron los representantes de los cinco clubes ‘grandes’, Boca, River, Independiente, Racing y San Lorenzo, principales impulsores de este proyecto.

Como cumpliendo con algunas estrofas del tema «Diferente al resto de la gente», los 21 dirigentes que llegaron hoy al edificio de la calle Viamonte dieron «un pasito pa’ lante», aunque en los últimos días habían dado «un pasito para atrás», cuando quebraron su relación con los directivos de la B Nacional.

Por eso ahora el objetivo de «los de primera» es convencerlos de que acuerden con ellos para finalmente conformar la tan meneada Súperliga, algo para lo que se necesita la aprobación de los 53 clubes que van a tomar parte de ella, vale decir los 30 de la A y los 23 de la B Nacional.

Por eso al final del encuentro los concurrentes firmaron una «adhesión a la Súperliga profesional del fútbol argentino asociación civil», según el pomposo enunciado de este grupo.

Para ello esta noche se conformó un borrador con el que sería el estatuto de la Súperliga e inclusive se designaron a sus autoridades provisorias, recayendo esas responsabilidades en el abogado Marcelo Deluca, revisor de cuentas de Estudiantes de La Plata, como presidente, mientras que el tesorero será Gonzalo Mayo, de River Plate, y el secretario Mariano Clariá, también abogado de Boca.

Belgrano, Temperley, San Martín de San Juan, Godoy Cruz y los cinco grandes no estuvieron representados en esta reunión. El ‘celeste’ cordobés porque su titular es el presidente del Comité de Regularización, Armando Pérez, y el del Sur porque quien hasta anteayer conducía sus destinos, Hernán Lewin, renunció por «aprietes» de la ‘barra brava’ del club.

«Es necesario fundar la Súperliga porque eso significa la unión del fútbol argentino y es una responsabilidad que tenemos todos los dirigentes», le indicó a Télam el presidente de Banfield, Eduardo Spinosa, quien tuteló la reunión.

«Debemos estar todos juntos, porque acá nunca se habló de parar el fútbol. Pero si habría que hacerlo sería por la renuncia de Hernán Lewin como presidente de Temperley. Nos dolió que esté afuera del fútbol argentino por los violentos», indicó.

Y sobre los rumores de desafiliación que podría impulsar la FIFA por todo lo que se vive en el fútbol argentino, Spinosa apreció que eso «sería letal para la AFA, porque se plantearía un escenario tremendo, ya que no se podrían jugar los campeonatos nacionales, no podrían intervenir en torneos internacionales los seleccionados y no se podría vender jugadores», concluyó Spinosa.

«La reunión de hoy es el principio de un acuerdo. Es la intención de la mayoría de los clubes que se apruebe la Súperliga, pero para ello tendremos que darles confianza a los dirigentes de la B Nacional», sostuvo por su parte el titular de Olimpo, de Bahía Blanca, Alfredo Dagna.

«Yo entiendo que el fútbol no puede estar dividido, porque acá todos somos importantes y cada club debe tener voz y voto», advirtió Dagna, que fue delegado por este grupo para asistir a la reunión en forma de asado que esta noche celebraban todos los dirigentes del ascenso en la sede del club Barracas Central, territorio del candidato a presidente de AFA, Claudio ‘Chiqui’ Tapia.

La misión de Dagna será ciclópea, ya que deberá convencer puntualmente a los dirigentes de la B Nacional para que se sumen al proyecto de la Súperliga, pero de lograrlo, la idea es que todo se formalice inmediatamente, si es posible mañana mismo.